La primera mitad del año pasó más rápido que una canción punk. Fue un semestre generoso en sonidos. Seis meses en los que brillaron nuevos y antiguos talentos que, para muchas personas, pasaron desapercibidos entre tanto partido de fútbol y despacho desde Brasil. Por eso, aquí va una breve lista de discos que vale la pena escuchar antes de que el año se nos vaya de las manos. Además, cada recomendación va a acompañada de un video para que puedas vitrinear antes de comprar.

Por culpa de la redondez de la tierra, este disco llegó a nuestros oídos en febrero, con las peores condiciones climáticas posibles para poder disfrutar su sonido. El nuevo trabajo de Beck es un álbum que nació para ser escuchado tomando algo calentito. Si llueve afuera, mejor todavía.

Angel Olsen es una guitarrista y compositora estadounidense que ha grabado varios discos colaborativos que han sacado aplausos en la escena independiente. Este álbum solista es una excelente oportunidad para que quienes no la conocen se acerquen a su trabajo.

No hay nada que esperar. Ahora es el momento. Damon Albarn viene a mostrar este trabajo a Chile y lo mínimo que los fanáticos de Blur y Gorillaz pueden hacer, es escucharlo hasta aprendérselo de memoria. Vale la pena hacerlo, porque Everyday Robots es de esos discos que enamoran de a poco.

Como buen disco de espíritu punk, el nuevo trabajo de Cloud Nothings dura media hora. Es intenso, divertido, juvenil y desprejuiciado. Igual que el video de su primer single. Si tu forma de recorrer la ciudad es en patines o skate “Here And Nowhere Else” es el disco que más te va a gustar de toda la lista.

Es imposible que no hayas escuchado Happy, el primer single de este disco. Si te la perdiste en la radio, te agarró en la tele, en un supermercado, en el pasillo del mall, en una junta en casa, el bar de la esquina o el entretiempo de un partido de fútbol. El disco completo es bueno, en todo caso. Aquí va otra canción, para variar un poco.

Cuando ves personas que pedalean sonriendo en una bicicleta con canastito y no entiendes cómo ni por qué son tan felices, es señal inequívoca de que te falta escuchar a Real Estate. Cualquier disco que elijas va a estar bien, porque son todos fabulosos, pero ya que estás leyendo esta lista deberías partir por hacer click al video y conseguir Atlas.

Talking Backwards

Este no es un disco de Varios Artistas en el sentido de compilado o popurrí. La banda se llama Varios Artistas y son chilenos. ¿Vio que ingenio? Además son generosos, ya que el disco se puede bajar completamente gratis desde este link. 

Más nocturno que diurno, más serio que palomilla, más nublado que variando a parcial. Sharon van Etten es una compositora maravillosa que saca un disco bueno tras otro. Pero ojo, que este disco no es para todo tipo de público. Un amigo me dijo que lo encontró “afectado”. La canción favorita de mi amigo es el himno del mundial, en todo caso.

Coldplay tiene tantos fanáticos como detractores. Si no tienes problemas con los himnos para la masa y los sonidos menos arriesgados, seguramente vas a disfrutar la nueva entrega de la pandilla comandada por Chris Martin. Si te brillaron los ojitos cuando viste que más arriba aparece el disco de Angel Olsen, es probable que ya hayas dejado de leer este párrafo.

St. Vincent es el nombre artístico de Annie Clark, una de las mejores guitarristas de la última década aunque ninguno de sus discos es eso que llaman “un álbum de guitarras”. Escuchar su música es entrar a un laberinto creativo profundo, desde donde no es fácil escapar. Cada vez que la recomendé le conseguí un nuevo fanático.

Jack White es genio y figura. Compone, canta, toca guitarra, batería, piano y bajo. Tras fundar The White Stripes, The Raconteurs y The Dead Weather se embarcó en una carrera solista que ha entregado dos discos de extraordinaria factura (de hecho, revisamos en detalle el Lazaretto en un artículo anterior).