“Con tu abuelo, todas las noches nos tomamos una copa de vino, dicen que hace bien, ese es mi secreto”, aseguran muchas abuelas. Pero, ¿nos estuvieron engañando todo este tiempo?
Estudios sobre el consumo de alcohol hay por montones, pero uno publicado este año en la revista médica The Lancet, analizó su relación con el riesgo de contraer algún problema de salud, asegurando que los daños aumentan con cada copa adicional por día y que los daños generales son más bajos si no se consume. Entonces, ¿ninguna cantidad de alcohol es sana para la personas, aunque sea una copa “inofensiva” al día?
“Nuestros resultados muestran que el nivel más seguro de consumo de alcohol es ninguno”, concluye el estudio. Y hace unas semanas nos encontramos con cientos de titulares en la prensa que aseguraban esto, pero ¿tiene este estudio la última palabra?, ¿qué actitud es la correcta ahora que se viene el 18? En El Definido lo averiguamos. ¡Salud!
Los científicos se pasan haciendo estudios de todo tipo, que nos ayudan a comprender, descubrir y derribar algunas situaciones. El consumo de alcohol es una de esas cosas que ha sido muy investigada y que, por lo mismo, hay bastante información sobre ella.
Sin embargo, el estudio publicado en The Lancet fue presentado por muchos medios casi como si tuviera la última palabra sobre el consumo de alcohol moderado, pero como explica un artículo en The New York Times, no hay que apresurarse a “hacerle la cruz” al alcohol, porque hay algunos elementos que hacen que el estudio presente algunas limitaciones. ¿Cuáles?
Por ejemplo, que no se trata de un nuevo estudio clínico. Es un metaanálisis (reunión de datos) a partir de muchos estudios observacionales hechos previamente. Aunque probablemente sí es el más grande que se ha hecho hasta ahora.
Además, no fueron considerados otros factores, como que hay gente que toma y fuma (y la diferencia en su salud la puede estar haciendo ese segundo vicio), que puede haber diferencias genéticas entre cada sujeto de estudio o problemas de salud u otros factores que no fueron analizados, pues es una suma de estudios anteriores.
El profesor de Pediatría en la Facultad de Medicina de la Universidad de Indiana, Aaron E. Carroll, explica que al analizar las cifras entregadas por el estudio, en realidad el riesgo de consumir una copa diaria no sería tan alto como algunos titulares nos hicieron creer. Él aclara que estos riesgos efectivamente pueden existir, pero si los hay, serían “mucho más pequeños que otros varios riesgos en nuestra vida”, dice.
● Te puede interesar: La vuelta al mundo en seis desconocidos tragos
¡Qué confusión! ¿A quién creerle entonces?
Para despejar todo tipo de dudas, en El Definido conversamos con el director del Departamento de Biología Celular y Molecular UC, Waldo Cerpa, quien ha estudiado el tema del alcohol en los adolescentes. Él nos aclaró que es probable que la cantidad de alcohol que una persona consume, no sea lo más importante a la hora de analizar sus consecuencias. Dice que es en el patrón de consumo en donde hay que poner más ojo. ¿Por qué?
Explica que si una persona consume la cantidad de alcohol máxima sugerida, que son 100 gramos (de alcohol puro) a la semana, y lo divide para consumirlo dentro de los siete días en partes iguales, no debería tener un efecto negativo para la salud. "El daño es prácticamente nulo", asegura.
¿Cuánto son 100 gramos de alcohol?
Se ha definido que un trago tiene 10 gramos de alcohol, sin embargo, un problema que tenemos en Chile, es que el trago estándar tiene mucho más alcohol que lo que recomienda la OMS (sí, hablamos de la piscola). Se ha calculado que un trago promedio, tiene 14 gramos de alcohol.
SENDA |
Entonces para tener una idea, si lo máximo que se puede consumir en la semana son 100 gramos de alcohol, una persona en Chile debería tomar como máximo 3,6 combinados fuertes (piscolas) a la semana, ya que cada vaso contiene casi 30 gramos. En la siguiente tabla puedes ver más ejemplos.
Tomo el Control |
Sin embargo, si esos 100 gramos de alcohol una persona los divide en uno o dos días, la cosa es distinta, y ahí sí que hay efectos negativos evidentes. A esto se le llama consumo en atracón, es decir, cuando en poco tiempo el cuerpo recibe un shock alcohólico. Y en la práctica, esto es lo que más ocurre, sobre todo dentro de la juventud. A este comportamiento de beber mucho en poco tiempo, se le llama binge drinking (consumo excesivo de alcohol).
SENDA |
En otras palabras: si tu abuela se toma una copa de vino al día, al final de la tarde, es mucho más “sano” que si tú te emborrachas el próximo 17 y 18 de septiembre a más no poder cada noche, tomándote cuatro piscolas por fonda. Ahí tu cuerpo se resiente y se generan consecuencias a largo plazo. El atracón es lo que pone en riesgo tu salud.
Otro punto importante a la hora de analizar los riesgos, es el nivel de desarrollo del cerebro. "Para poder decir que tomar poco es menos riesgoso, hay que tener el desarrollo cerebral completo, estamos hablando de personas sobre 23 años", advierte Cerpa.
El problema, es que en Chile la edad de inicio promedio de consumo de alcohol entre menores de edad, es a los 13 años, lo que significa un tremendo riesgo de ya que está comprobado que esto genera un gran daño físico e incluso alteraciones neurológicas.
Mientras el desarrollo cerebral cognitivo no esté terminado, aunque el consumo sea en dosis bajas, es malo, independiente de la cantidad que se tome. Por eso se justificaría la decisión de algunos países, como Estados Unidos por ejemplo, de retrasar el consumo legal de alcohol hasta los 21 años (que en la práctica los adolescentes comiencen antes, es otro tema).
Entonces, lo recomendable es retrasar el consumo de alcohol lo máximo posible. "Mientras más desarrollado esté el cerebro de una persona, es más fácil que no tenga un efecto negativo por parte del alcohol", explica Cerpa.
● Te puede interesar: El éxito en China lo determina el alcohol
Entonces para aclarar el panorama y que no cunda el pánico, hay que tener claro que: “En realidad en el caso de los adultos que tienen consumo moderado, no hay nada que demuestre que sea malo, lo que pasa es que no hay nada que demuestre que sea bueno”, afirma Cerpa.
Sí, es confuso porque no hay una respuesta taxativa, pero por lo menos las claves respecto al cómo tomar y a qué edad hacerlo, nos otorgan una buena guía.
Además, Cerpa aclara que hasta ahora no existe ningún estudio que pueda asegurar que beber alcohol diariamente es bueno para la salud, y que probablemente esto nunca sea comprobado. “Como política pública es prácticamente imposible que se plantee la posibilidad de que tomar poco es bueno, eso yo creo que no va a pasar”, asegura.
Por último, explica que también es difícil comprobarlo, porque hay una serie de factores personales y sociales involucrados que pueden hacer que cada persona tenga una reacción distinta al consumo de alcohol. "Por ejemplo, una persona que está deprimida va a responder distinto a una persona que está en condiciones normales y un fumador también va a responder distinto”.
¿Conclusión? Todavía no está todo dicho sobre el consumo alcohol y puede que falte un tiempo para que podamos saber con mayor certeza cuáles son los reales efectos de una copa diaria. Pero de lo que sí no hay duda y en lo que todos coinciden, es en que el exceso sí es malo para la salud, sobre todo cuando se beben grandes cantidades en un solo día y mucho peor si se trata de adolescentes. Así que la mejor opción según el SENDA es no beber, pero si decides hacerlo, que sea con moderación y teniendo en cuenta los posibles riesgos.