Está a la vista de todos: los niños están usando cada vez más temprano dispositivos tecnológicos. Nosotros también estamos detrás de las pantallas y los menores lo ven día a día, por eso a los papás les resulta difícil, sobre todo en estos tiempos, privar a sus hijos de la tecnología.
Es natural, los tiempos cambian y la tecnología también, pero, ¿cómo se supone que deberíamos enfrentar el prematuro ingreso de los menores al mundo digital, sobre todo en la época del boom de las redes sociales?
Un estudio realizado por Common Sense Media, una organización estadounidense preocupada del bienestar infantil, hace tres años señaló que uno de cada tres niños norteamericanos, sabe usar un dispositivo móvil antes de hablar. Otra investigación publicada por la Academia Americana de Psiquiatría, arrojó que los niños entre 8 y 10 años pasan ocho horas al día en diferentes medios de comunicación, ya sea televisión e internet.
Las opiniones están divididas entre quienes consideran que el uso de la tecnología a temprana edad es negativo, y los que piensan que contribuye al aprendizaje y por lo tanto, permiten e incitan a sus hijos a acceder a ella.
La clave pareciera estar en el correcto uso que se le da a estos dispositivos.
La psicóloga de Harvard, Catherine Steiner-Adair, en su libro La gran desconexión: protegiendo las relaciones de la infancia y la familia en la era digital, dice que los papás están perdiendo tiempo valioso de comunicación con sus hijos, debido a que los niños están pasando, la mayor parte del tiempo, detrás de pantallas.
Es casi inevitable: ellos aprenden de lo que ven a su alrededor, y lo que ven no son precisamente a adultos que no dependen del celular, de hecho, sucede lo contrario. Los menores toman como referencia los hábitos de sus papás.
Es por eso que la autora aconseja, que en situaciones importantes como la comida familiar y conversaciones, no usar los dispositivos. La idea es que en esos momentos valiosos, nos olvidemos por completo de las redes sociales.
La experta también propone una serie de recomendaciones, a la hora de dejar que los niños tengan acceso al mundo digital:
Un estudio publicado por la Academia Americana de Pediatría, Niños, adolescentes y los medios, considera que los niños y jóvenes pueden tomar decisiones que sean riesgosas para ellos, a partir de la gran cantidad de información y contenido que consumen de internet. Esto sumado a largas horas que permanecen detrás de las pantallas, lo que puede afectar la calidad de la relación familiar.
Estas son las recomendaciones que la Academia dice que los padres deben seguir:
Estamos en una época donde estamos hiperconectados virtualmente, que estamos dejando un poco de lado la conexión con nuestro entorno. Por esta razón deberíamos empezar por nosotros, así como en las indicaciones para asistir de oxígeno a un menor, tras una emergencia en un avión: primero yo y después él.
Aplicar estas restricciones en el uso de la tecnología no es una manera de castigar, de hecho, todo lo contrario. La idea es que todos estas acciones se conviertan en hábitos, ya que de esta forma, la relación familiar se hará mucho más fuerte. Propiciemos más la comunicación cara a cara, y démosle el ejemplo a nuestros hijos y nuestro alrededor.