Es mentira que los libros son caros. No lo son. Hoy una entrada al cine, en sala premiere, cuesta $8.000… y la diversión dura sólo dos horas. ¿Un libro? Por un libro puedes pagar lo mismo, o un poco más –incluso el doble-, pero la experiencia te acompaña durante varios días. Sobre todo si la novela es gorda y te mantiene atrapado, en suspenso, intrigado, hipnotizado con su trama.
Echando mano a mi experiencia y a los consejos de mi infalible asesor literario oficial, Cristian Ortega (@ortegapuppo en Twitter, librero del local Catalonia del Drugstore, en Providencia), elaboré este listado para ustedes: cinco gruesos novelones que no podrán dejar de leer. Entretención asegurada para instalarse durante horas a pasar cientos de páginas, emocionarse, sorprenderse y comerse las uñas de los puros nervios.
El japonés autor de “Tokio blues” y “Kafka en la orilla” fue catalogado por el periódico The Guardian como uno de " los mayores novelistas de la actualidad". En “Crónica del pájaro…” relata la historia de Tooru Okada, un joven que acaba de dejar su trabajo en un bufete de abogados y recibe una llamada anónima. Hay una mujer al otro lado de la línea. A partir de ese momento, la existencia de Tooru sufre una transformación. Su propia mujer desaparece y a su alrededor comienzan a surgir misteriosos personajes… llegando incluso a situaciones fantasmagóricas. Entonces el protagonista entenderá que su misión es resolver algunos conflictos que ha arrastrado durante toda su vida.
Este libro lo incluyo aunque Ortega, nuestro experto, se oponga. Y es que fue el primer libro de más de 400 páginas que leí en mi vida. Estaba en el colegio todavía… y me sentía orgulloso de haber conseguido tamaña proeza. El título hace referencia a los residentes de un manicomio, locos (aquellos “renglones torcidos”), marcando el lugar donde se desarrolla la trama: Alicia Gould ingresa a un psiquiátrico para investigar un crimen macabro… y el asunto se le escapa de las manos. El autor, en su calidad de periodista (fundador del ABC de Madrid), utiliza con genialidad la pluma, enganchando al lector desde el primer párrafo. Ideal para que un adolescente le tome gusto a la lectura.
Al autor de Logia ya le dicen “el Dan Brown chileno”. ¿La razón? Las aventuras de Elías Miele, el protagonista, son comparables a lo sucedido en “El código Da Vinci”, con la atractiva diferencia de que sus indagaciones y persecuciones terminan en territorio chileno, en rincones de la ciudad de Santiago que hemos visitados muchas veces (como la Virgen del cerro San Cristóbal), y cuya verdadera historia, al parecer, desconocíamos. Accidentes aéreos, secuestros, sexo, disparos, traiciones, fanatismos religiosos… todo mezclado en una explosiva coctelera que involucra al mismísimo Bernardo O´Higgins. Por algo Logia es hoy el “top 1” entre los bestseller locales. Me lo leí en sólo una semana, y consiguió que durante ese tiempo me olvidara de la existencia de Netflix.
El año 2007 falleció la joven escritora Aura Estrada, quien estaba casada con Francisco Goldman, el autor de “Di su nombre”. La mujer murió de manera repentina, en una playa de Oaxaca. El viudo, entonces, durante casi seis años, escribió esta novela… en la que todos pensaban quedaría retratado su dolor y soledad. Sin embargo, y para regocijo de la crítica, Goldman mostró una prosa llena de vida y un hermoso relato lleno de grandes sorpresas. Así lo resume Guadalupe Nettel, en una de las tantas crónicas que se escribieron en torno al libro: “Quizás su mayor cualidad radique en la honestidad que lo inspira. Más que intentar convencernos de algo, la intención de Goldman –como la de los grandes novelistas– es mostrarnos la vida con sus múltiples contradicciones y claroscuros, la carga de odio que muchas veces hay dentro del amor, las traiciones que inevitablemente cometen quienes más nos aman”. Un imperdible en el casillero de las novelas románticas.
Es cierto: son más de mil páginas. ¿Mucho Lucho? No. Y es que Pynchon tiene una manera muy particular y sugerente de escribir, en la que recrea la historia del mundo –nada más y nada menos- desde 1893 hasta los años posteriores a la Primera Guerra Mundial. No es sólo una historia, sino que cientos de ellas, entrelazadas, que trasladan al lector de un lugar a otro. Así, el viaje pasa por Nueva York, Londres, Venecia, Siberia, México y Hollywood, en la era del cine mudo. Es un libro de largo aliento y uno de los favoritos de Cristian Ortega (calidad garantizada).
Cuéntanos: ¿Cuál es el libro gordo más entretenido que has leído? La guía telefónica no es una opción.