El pasado 6 de septiembre se estrenó la nueva película del universo expandido de El Conjuro. La Monja arrasó en la cartelera nacional y no pudimos evitar tocar un tema importante del género cinematográfico: ¿Donde encontramos el "verdadero" cine de terror? ¿Es La Monja el mejor ejemplo de este?
¿Terror? ¿Cuál terror?
Muchas veces nos encontramos con opiniones en internet que hablan de "la última papita del cine de terror". Películas que alimentan la expectativa con frases como "basada en hechos reales", "la historia jamás contada" o "la película que provocó un paro cardiaco a una persona en la sala de cine", etc. Opiniones desbordadas y marketing al hueso que finalmente nos llevan a pensar una y otra vez que cada título que llega a nuestra cartelera, es mejor que el anterior. Pero ¿a quién creerle?, ¿cuál es el verdadero cine de terror?
Claro está que todos tenemos gustos diferentes, pero es bueno también informar que en este universo, actualmente, hay dos tipos de estilos dentro de un mismo género, los que sería bueno saber diferenciar para evitar confusiones engorrosas:
1. El cine “jump scare” (también conocido como el... “¡cuidado con el mono que hay detrás!”)
Probablemente el cine jump scare sea el más masivo de todos y el que todo el mundo conoce. El universo de El Conjuro (El Conjuro, El Conjuro 2, Annabelle, Anabelle: La Creación, La Monja, etc) es uno de los más claros ejemplos que utiliza el recurso del "susto-doble-susto"; ese incómodo momento de la película en que utilizan golpes de ruidos luego de largos tiempos de silencio.
Ocurre que este tipo de cine, es la fórmula que hoy en día se ocupa para cortar tickets y hacerle creer al mundo que es la senda real de lo que entendemos por "terror". ¿Es terror? Puede ser, pero nadie puede negar que es una fórmula refrita que hemos visto desfilar las últimas dos décadas de la mano de las grandes majors (Warner, Fox, Universal, principalmente).
¿Funciona? SÍ. Pero ustedes entenderán que tantos años de jump scares han hecho olvidar lo imprescindible que son las otras películas, esas que buscan otro tipo de experiencias en el espectador, y que igualmente nos llevan hacia los pasadizos oscuros del miedo.
Aprovechando esa última frase es que tenemos "el otro tipo de terror" (el bueno, para mi gusto).
2. El cine de "miedo" (o el que te genera cosas raras en el cuerpo)
Pasa que desde que el cine jump scare comenzó a surgir con las películas slasher (por ahí en los 80s, esas que se caracterizan por un psicópata que asesina adolescentes), otros optaron por seguir una línea mucho más independiente y a veces un tanto incomprendida... Línea que ha perdurado hasta el día de hoy.
Defino aquí y ahora como el cine "de miedo", a esas películas que no solo llaman a un salto hacia lo desconocido, sino que son capaces de meterse bajo tu piel y provocar escalofríos con un buen guión, personajes frescos y monstruos muy alejados del término cliché. Si, es verdad que son películas que no todo el mundo puede digerir y que a la menor confusión, se prestan para ser consideradas sobrevaloradas o aburridas.
Estas películas se caracterizan por tener planos muy bien cuidados, una fotografía sensible, diálogos tremendos y situaciones o giros inesperados. Todo en marco de una gran historia que no pretende ser "algo más del montón". Es más, son estas películas las que generalmente logran llegar a festivales internacionales y son premiadas antes de llegar a nuestros cines (por eso el retraso de muchas de ellas).
De hecho, sin ir más lejos, aquí en El Definido me ha tocado escribir de películas como¡Madre!,Viene de Noche , la serie Dark y otras, que muchas veces son acusadas de vender humo y que no merecen ni una pizca de atención. Bueno, aquí nos gusta darles un merecido mérito, porque se liberan de lo que hemos descrito anteriormente y porque en de-fi-ni-ti-va, son películas o series muy bien pensadas desde el punto de vista indie-creativo.
En un esfuerzo de producción, buscamos a dos enciclopedias del cine de terror, y les preguntamos qué opinaban sobre las películas del género que actualmente llegan a cartelera nacional.
Egidio Pérez S., organizador de Monstercon y Zombiewalk, asegura:
"Sin miedo a equivocarme, podría decir que es el género favorito de la mayoría de los directores novatos, y la cantidad de títulos al año que se estrenan es incontable. Filmes como La Monja, son solo la punta del iceberg de un fascinante mundo del cual solo tuvimos acceso gracias a la magia del internet".
Respecto a la línea divisoria entre los jump scares y el cine "de miedo", Javier Suárez, director de FANGES, dice estar de acuerdo en ciertos puntos:
"Películas de susto pueden haber millones. Es la manera fácil de hacer que las personas se congelen frente a una pantalla y las grandes industrias lo saben [...] El verdadero desafío para el terror, es mantenerse vigente con historias de terror cada vez más humanas y menos fantásticas. Ahí es donde el cine independiente, entre argumentos originales muy buenos, ha logrado mantenerse vivo y deja al género del terror en un estándar muy alto”.
A ver... vamos comparando...
No es fácil declarar que "algo sea bueno y lo otro malo". Simplemente es cosa de mirar lo que hay en cartelera y lo bueno que sería que el jump scare se arriesgara a salir de su zona de confort, dejando de ser historias predecibles y parecidas unas con otras (todas se tratan de personas acosadas por demonios o todas tienen la misma fórmula consolidada por James Wan).
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El Exorcista, por ejemplo, fue una película revolucionaria y atrevida para la época (1973). Todas las que están basadas en novelas de Stephen King tienen su "qué" y no se construyen sobre cimientos débiles de narrativa. La Masacre de Texas, de hecho, tiene su origen en un asesino real que conmocionó a la opinión pública y que sentó las bases de un nuevo tipo de terror adolescente. Incluso El Proyecto de La Bruja de Blair, The Witch y Hereditary, son tan diferentes y únicas por sí solas dentro del concepto de "brujería", que nunca necesitaron explicar todo con manzanitas. Porque para ellas (las películas), la paranoia en el espectador es mucho más importante que los finales resolutos.
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Y yendo al cuestionamiento principal que los llevó a leer esta columna y frente a otras grandes pelis de terror como las que acabamos de mencionar, les pregunto: ¿Qué nos puede entregar una película como La Monja? ¿El Conjuro? ¿El Exorcismo de Juanito Pérez? ¿Ustedes prefieren el cine de tipo jump scare o el "de miedo"? ¿Será que el chileno adora los sustos por sobre el miedo? ¿Les aburre ver siempre el mismo tipo de películas? Espero sus opiniones, aquí abajito.
¿Ustedes prefieren el cine de tipo jump scare o el "de miedo"?
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