No es raro enterarnos por la prensa sobre accidentes lamentables provocados por una explosión o fuga de gas, como el que ocurrió el fin de semana en el Sanatorio Alemán de Concepción, en el que tres personas murieron y 46 resultaron heridas.

Por eso en El Definido conversamos con Gabriel Roa, gerente comercial de Ecogas S.A, empresa perteneciente a la Asociación de Empresas Certificadoras de Gas (ANECER A.G.), quien nos contó qué debemos que hacer para prevenir accidentes en los hogares.

1. Mantención periódica

Reconozcamos que somos pésimos para las mantenciones y sólo recurrimos a los técnicos cuando nos quedamos sin agua caliente (porque el calefont falló) o sin cocina (porque algo está mal y no sabemos qué es).

Tirón de orejas para todos, porque cuando hablamos de instalaciones que utilizan gas el tema es delicado, ya que una falla puede ser gravísima. Roa explica:

“Para las casas que tienen artefactos ya sea cocina, calefont o similar, es fundamental que el residente tome el hábito de dar cumplimiento a lo que sugiere el fabricante de cada artefacto. Cada fabricante establece como mínimo hacer mantención cada seis meses”. Agrega que esto se sugiere porque los equipos se descalibran con el uso diario, y requieren que se los regule periódicamente.

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2. Gásfiter certificado

Mi vecino tiene un dato súper bueno, su maestro pinta, ve cosas eléctricas y también sabe sobre gasfitería, así no tienes que ver cada cosa por separado.

Si el dato de tu vecino es una persona que cuenta con la respectiva certificación de la SEC, perfecto, pero generalmente acudimos al clásico maestro chasquilla, que muchas veces no tiene la experiencia ni los conocimientos que requieren los artefactos a gas.

SEC Imagen referencial de la credencial que deben portar los instaladores.

“Estas mantenciones, es fundamental que sean realizadas por personal autorizado. Acá los maestros chasquilla o la persona que dice que le pega al gas, que sabe de gas, puede ser fatal”, dice Roa.

3. Evitar errores

Hay personas que con tal de que no entre frio a la casa tapa las ventilaciones, y esto es un grave error, porque “dado que no tenemos mucha cultura de hacer mantención de los artefactos, resulta fundamental que los sistemas de ventilación -es decir, la ventilación inferior para que entre aire fresco al recinto y la ventilación superior para que evacuen los gases quemados producto de la combustión- estén habilitados. La combustión consume oxígeno y eso es lo que provoca la muerte de las personas”, explica Roa.

Otro error frecuente, es utilizar elementos o materiales que no están normados. "Sigo viendo conexiones del cilindro a la cocina con mangueras plásticas, cuando hoy día tiene que ser flexible metálico", asegura.

Otros ejemplos de errores comunes, son conexiones mal apretadas y sin el torque adecuado, lo que finalmente puede provocar una filtración.

4. Saber reaccionar

Si entras a un recinto en el que hay olor a gas, inmediatamente hay que hacer dos cosas: abrir puertas y ventanas para que el aire circule y cortar el gas (es importante que no solo tú lo sepas, sino también tus hijos).

“Esas son las dos medidas básicas. Que no se les ocurra por nada del mundo encender un fósforo o una luz, porque esos son puntos de emisión y hay gas acumulado dentro de ese ambiente, puede significar una explosión enorme”, advierte.

Luego de eso, si el gas está conectado a la red de cañerías, llamar a la empresa distribuidora que corresponda y en el caso de que haya un cilindro, llamar a un instalador autorizado por la superintendencia para que ellos acudan a revisar el problema.

5. Prevención y proactividad

Roa dice que es necesario que cambiemos el switch para realizar un trabajo más preventivo (mantenciones) que permita que el uso de los artefactos, se pueda realizar con tranquilidad y no inseguridad. ¿Y si te vas de vacaciones?

Asegúrate de cortar el gas de la casa y cuando vuelvas tomar el resguardo de ventilar y de preocuparte de ir prendiendo cada uno de los quemadores o la estufa de a poco: “no todo a la vez para ir viendo cómo se va comportando, porque luego de varios días sin uso, se tienden a ´agripar´ las conexiones, entonces eso puede provocar que al principio salga olor o que cueste que vuelva a retomar el ritmo de funcionamiento diario”, dice Roa.

Por último, dice que es necesario que las personas tomen una actitud más proactiva y que además de preocuparse de que todo esté en orden en la casa, también es importante preguntar y saber si el lugar de trabajo, el colegio o en el jardín infantil de sus hijos, cuenta con la inspección periódica al día y tiene la mantención de sus artefactos bajo la norma.

De todos nosotros depende que una tragedia como la del fin de semana, no se vuelva a repetir.

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