- Nooo papá, ¡otro cuento por favor!
- Mañana, ya es hora de dormir.
Si cuando pequeño pudiste experimentar ese maravilloso momento de escuchar un cuento antes de dormir, sabrás hoy lo valioso que es que alguien relate una historia. Imaginar mágicos lugares, situaciones y personajes, narrados por un ser querido o un experto, es algo increíble para cualquier niño y por eso hoy podemos recordar esos cuentos que alguna vez escuchamos con tanto cariño. ¡Larga vida a todos ellos!
Los beneficios que trae escuchar un cuento para los niños son numerosos y van mucho más allá de la mera diversión. Es por eso que es importante mantener esta milenaria tradición, no solo dentro del núcleo familiar, sino también en bibliotecas y otros espacios literarios. En El Definido les contamos más detalles de sus grandes ventajas y sobre un actor clave que podría aportar a mantener esta bella práctica.
Porque la entretención es la puerta de entrada a un montón de aprendizajes, estos son algunos de los principales beneficios que trae el escuchar cuentos.
Pero ojo, que escuchar cuentos no debe solo ser relegado al mundo infantil, ya que también es muy enriquecedor para los adultos. Por lo mismo, varios de estos beneficios se aplican también a ellos, además de ser una entretención alternativa.
Los adultos mayores pueden ser un actor muy importante si de cuentos se trata. Solo basta pensar en los abuelos y la dedicación que pueden tener para contarle un cuento a un nieto, la paciencia que han desarrollado y el potencial de narradores que pueden tener con su experiencias.
Buscando nuevas maneras de motivar a este grupo etario, es que Caja Los Andes organiza talleres de cuentacuentos, donde ellos pueden aprender las herramientas necesarias para ser un experto en narrar historia. ¿Qué significa esto?
"Cualquiera puede contar un cuento, pero contar un cuento movilizando tu cuerpo, con inflexiones en la voz, teniendo herramientas que te van entregando la llegada, es algo que se debe aprender", nos cuenta Mirtha Lillo, una de las orgullosas egresadas del curso.
Mirtha tiene cuatro nietos a los que suele relatarle historias y llegó sin saber mucho de qué es lo que iba a aprender. Su paso por este curso, en manosFundación Mustakis, le cambió la vida, según nos cuenta. No solo desarrolló sus habilidades, sino que encontró una nueva actividad con la que aportar. Es por eso que para ella, contar cuentos tiene un valor fundamental.
"Claramente el cuento además de entretener educa, además de crear lazos muy fuertes de tipo emocional. Los cuentos de niño siempre dejan algo de enseñanza, entonces nosotros incorporamos también todo lo que sea positivo", recalca.
Desde que comenzó, Mirtha ha participado como cuentacuentos con sus compañeros de grupo en los más variados lugares: escuelas, en una sala de espera de un centro de salud, en la Biblioteca de Santiago y también en hogares de ancianos.
"Es algo tan enriquecedor para uno como cuentacuentos, porque logras captar la atención de niños y adultos. Hay un minuto increíble en que los adultos están más interiorizados en el cuento que los niños mismos. Yo creo que existe un sentimiento retrospectivo a cuando eran niños y tenían abuelos, mamas, tías, y vuelven a ese recuerdo maravilloso que es la infancia. Se crea un ambiente tan increíble, que yo no soy la misma de antes", nos dice.
Actualmente, ella es la representante de un nuevo grupo que se formó a partir del curso, compuesto por adultos mayores que se dedican a contar cuentos. Se reúnen semanalmente y ya tienen un plan de trabajo para este 2017, donde seguirán con el apoyo de Caja Los Andes y la Fundación Mustakis, para seguir relatando historias de manera permanente a niños y adultos.
Mirtha nos confiesa que hoy, son sus mismos nietos el primer filtro evaluador. Pequeños encantados con la nueva faceta de su abuela, que con papel en mano califican su desempeño en diversos aspectos, mientras gozan de los mágicos relatos.
"Esto a mi me ha llenado la vida", nos dice. "Estoy muy contenta de haber tomado la opción en el grupo que estamos y darnos cuenta que a esta edad todavía tenemos muchos que entregar".