Lograr una casa duradera y resistente, de materiales de buena calidad, espacios amplios, bien aprovechados y finas terminaciones, es el objetivo de todas las constructoras, arquitectos y propietarios. Lograrlo en el menor tiempo posible, lo que quieren todos. Y lograrlo en un solo día, un sueño.
Bueno, esto ya es una realidad. La empresa chilena de construcción BauMax desarrolló un proyecto pionero en Latinoamérica que pretende cambiar la industria inmobiliaria. ¿Cómo? Con viviendas de hormigón por bloques, construidos con un sistema robotizado en 3D, que permite terminar y entregar casas de 120 m2 y excelente calidad, en menos de 24 horas. Su lema: "Construcción robotizada en hormigón que genera ahorros, reduce plazos y asegura calidad”.
En el mundo poco a poco se está haciendo más común la tecnología de impresión 3D para la construcción de casas (como China, por ejemplo) y ahora nuestro país se une a esta vanguardia.
Esta alternativa es una verdadera solución al problema inmobiliario que afecta a Chile por el encarecimiento de las edificaciones que ha afectado la economía y el desarrollo social; razón por la cual este proyecto se incorporó como parte de Construye 2025 del programa Transforma de Corfo, que busca mejorar la productividad, eficiencia y sustentabilidad en la industria de la construcción, con una meta concreta: reducir en un 20% los costos de producción de las edificaciones, aumentar en un 20% las edificaciones sustentables y disminuir en un 30% las emisiones de CO2 en Chile, de aquí al 2030.
La Ministra de Vivienda, Paulina Saball, señaló que “esto es parte de un conjunto de iniciativas que buscan que la construcción sea más eficiente y se conjuga con otros proyectos que estamos desarrollando en conjunto con el sector privado, como por ejemplo, el DOM en Línea, para que los permisos de edificación puedan ser sacados en cualquier parte del país, con mejores tiempos y mayor transparencia”.
BauMax produce casas de hormigón por bloques prefabricados, incluyendo los elementos para las conexiones eléctricas y sanitarias, las que luego se ensamblan en terreno, optimizando el tiempo de montaje.
Sus materiales y tecnología son traídos desde Alemania, pero el desarrollo de la ingeniería estructural se hace en Chile acomodándolo a nuestra naturaleza sísimica, y la capacidad inicial anual de construcción es de 1.500 casas de 120m2, es decir se pueden construir hasta 4 casas en un solo día.
El proceso robotizado utilizado para su construcción cuenta con varias ventajas:
- Reduce los tiempos de construcción en un 30% en comparación a los trabajos de albañilería, los costos de construcción en casi 2 UF por m2, y la mano de obra en un 50%, lo que genera certeza en los plazos de entrega. Pablo Kuhlenthal, gerente general de la empresa, nos dijo que "en el corto plazo hay reducción en el número de empleo, pero en el largo plazo las personas que dejan de trabajar en construcción se reubican y la economía en su totalidad se ve beneficiada. Lo mismo que pasó con la imprenta, los trenes, los autos".
- El sistema es eco amigable porque emite menos polución en el proceso constructivo, debido a la disminución de escombros, ruido y mermas, respecto a los procesos de construcción tradicionales.
- Excelente calidad: el proceso en ambiente controlado (tecnologías BIM: diseño, construcción y operación de proyectos en línea a través de modelos 3D), robotizado y gestionado por personal capacitado, asegura calidad superior en los productos entregados, sin margen de error.
.- Su sistema robotizado otorga gran flexibilidad en el diseño. Como los proyectos se hacen por unidad no hay problema en cambiar el diseño de la vivienda cada vez que la línea de producción termina una.
- Es una excelente alternativa de emergencia, para construcciones post catástrofes naturales, por ser casas definitivas, de calidad y rápidas de instalar.
Kühlenthal, señaló que “si tomamos como ejemplo una vivienda de 200 m2, el ahorro es de UF 1,41 por m2, equivalente entre el 10 al 15% del costo de obra gruesa. Además este sistema ofrece una vivienda considerablemente mejor, con muros de calidad, hormigón más resistente e impermeable”.
La fábrica de BauMax se encuentra en Lampa y ya se prepara para comenzar a imprimir el montaje de las primeras viviendas para los proyectos de Colina de Inmobiliarias Manquehue. Y si bien en estos momentos la empresa está trabajando solo con inmobiliarias, ya que son el principal canal de compra de viviendas, no descartan en un futuro trabajar de forma personalizada con los mismos clientes, e incluso comenzar a construir grandes obras y edificios y llegar a la construcción de viviendas sociales.
De masificarse esta tecnología, en un futuro cercano podría utilizarse como herramienta para la construcción más expedita de viviendas sociales de calidad probada, permitiendo más eficiencia en la atención de las necesidades de los chilenos y una mejor recuperación ante los daños que puedan generar algunos desastres naturales.