Ese sitio baldío que está frente al edificio en que vives, esa fea y gris esquina que te cruzas todos los días en tu camino al trabajo o esa playa de estacionamientos abandonada que se ha convertido en el palacio del graffiti, ¿qué aportan a la ciudad? Son terrenos de propiedad fiscal o privada que, hace años de años, se encuentran abandonados por falta de proyectos, de recursos o por simple desdén.
Pero un proyecto está dándoles un nuevo rostro a estos pequeños espacios, transformándolos en cómodas, relajantes y refrescantes “plazas de bolsillo”. Ya existen tres de ellas en Santiago y la iniciativa pretende seguir creciendo.
De acuerdo a las cifras que maneja el Gobierno, sólo en la ciudad de Santiago existen alrededor de 400 sitios eriazos o abandonados que son de propiedad fiscal y que, con un poco de voluntad, podrían convertirse en agradables espacios públicos que transformen nuestra ciudad en un lugar más acogedor, sobre todo durante los calurosos meses de primavera y verano. El proyecto ha sido impulsado por la Intendencia Metropolitana, el Gobierno Regional Metropolitano y el Ministerio de Obras Públicas.
La idea es incentivar que los transeúntes se movilicen a pie de manera segura, fomentando la participación ciudadana y diversificando el comercio local, pues la idea es que en cada una de ellas haya también ventas de refrescos, sándwiches o helados que amenicen la vida capitalina.
El Intendente Metropolitano, Claudio Orrego, señaló que este tipo de espacios suelen estar reservados para proyectos futuros, como la construcción de edificios, pero a veces sucede que por un largo tiempo esa iniciativa no se concreta. Es entonces que la creación de una económica plaza transitoria, pasa a ser una excelente solución para dar vida a espacios comunitarios. Luego añadió que sería una gran idea que los privados que tienen la propiedad de espacios de este tipo se entusiasmen también con la idea.
Plazas de bolisllo. |
El Ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, se comprometió a seguir buscando lugares propicios para la creación de este tipo de plazas: “Valoramos la iniciativa que ha propuesto el Gobierno Regional de generar plazas de bolsillo transitorias, y aportaremos realizando un catastro con cada uno de nuestros sitios en esta condición para poner a disposición y también, a través de nuestra Dirección de Arquitectura, en la implementación de estos lugares para que dejen de ser un punto negro en la ciudad y se conviertan en espacios urbanos que puedan favorecer a muchos santiaguinos y a turistas de otras regiones o países”.
Y no se trata de cualquier cosa, sobre todo si hablamos de una ciudad que intenta hacerse amigable al peatón. Sólo cabe hacerse un par de preguntas: quienes van a pie al trabajo, ¿se sienten cómodos caminando por las calles?, ¿sienten que los espacios urbanos están hechos para los transeúntes peatonales?, ¿ven lugares públicos habilitados para el descanso o la reunión entre peatones? ¡Pocazo! Si bien este tipo de espacios existen, están limitados a un puñado de comunas y no son, para nada, algo transversal a la capital (y en las capitales regionales, menos).
Es por esta razón que Alberto Texido, doctor en Arquitectura y académico de la Universidad de Chile, declaró que “se trata de un acierto en una ciudad que tiene déficit de espacios públicos”. Y luego añadió, “estas plazas de bolsillo son desmontables, ya que están instaladas en terrenos públicos o privados a la espera de una inversión o edificación, y que hasta ahora se encontraban desocupadas o escondidas tras una pandereta. Por tanto es bienvenido que, mientras se espera la inversión, se activen para el uso público”.
La idea es que todas las plazas de bolsillo estén ubicadas en sitios de alta afluencia peatonal, cercanas al transporte público, con cierre por la noche y que tengan, aproximadamente, 500 metros cuadrados.Es por esta razón que Alberto Texido, doctor en Arquitectura y académico de la Universidad de Chile, declaró que “se trata de un acierto en una ciudad que tiene déficit de espacios públicos”. Y luego añadió, “estas plazas de bolsillo son desmontables, ya que están instaladas en terrenos públicos o privados a la espera de una inversión o edificación, y que hasta ahora se encontraban desocupadas o escondidas tras una pandereta. Por tanto es bienvenido que, mientras se espera la inversión, se activen para el uso público”.
La buena noticia es que en Santiago ya existen tres de estas plazas, abiertas al público y listas para que vayas a tomarte un heladito primaveral bajo un agradable árbol, disfrutando de la brisa cálida (ojalá exenta de plátanos orientales).
La primera de ellas está en Morandé #83, justo en frente de La Moneda, y cuenta con Food Trucks, sillas, mesas para picnic, bicicleteros, zona para fumadores y recipientes para reciclaje de basura. Se encuentra abierta para todo público de lunes a viernes desde las 7 a.m. y hasta las 19 p.m.
Morandé #83. |
La esquina de Aníbal Pinto con Independencia, fue la segunda afortunada, en pleno barrio Las Telas, una zona de gran tránsito de público. Así, mientras vas en búsqueda de la tela con la que confeccionarás sus próximas cortinas del living, puedes hacer un alto en el camino y servirte un buen sándwich en la plaza de bolsillo. Aquí se han instalado también Food Trucks, mesas de picnic y jardineras. Aparte de incentivar el uso de los espacios públicos, el lugar pretende fomentar las ventas de los locatarios de la zona.
Barrio Las Telas. |
Providencia también cuenta con su plaza de bolsillo, en Padre Mariano #140, en medio de un terreno que desde hace varios meses estaba cerrado, sin uso alguno. La idea es que los oficinistas o residentes de la comuna, puedan dirigirse a la plaza de bolsillo para almorzar o pasar un rato al aire libre en un agradable espacio verde. En el sitio hay quitasoles, mesas de picnic, jardineras, escaños, bicicleteros gratuitos, árboles y Food Trucks que ofrecen diversos platos. Su acceso está habilitado desde las 8:30 a.m. hasta las 18 horas.
Padre Mariano #140 |
Esto es lo que hasta ahora existe, pero se proyectan a corto plazo dos nuevas plazas de bolsillo en la capital; una en el metro San Pablo (Lo Prado) y otra en la esquina de Santo Domingo con Teatinos (en el centro de Santiago). Esta última ya recibió la aprobación del Consejo Regional Metropolitano de Santiago
Así que si tienes alguna plaza de bolsillo cerca, ¡date una vuelta! Y refresca tu día a la sombra de un quitasol, tomando un rico juguito con tus compañeros de trabajo.
¿En que barrio crees que hace falta una plaza de bolsillo?