Es verano y la mayoría de los chilenos nos tomamos vacaciones entre enero y febrero para aprovechar las playas del litoral, el campo, el lago o el lugar que sea, y descansar algunos días junto a la familia o los amigos. Es tiempo también en el que debemos despejarnos, relajarnos, dejar atrás el estrés y el cansancio del año anterior, y recargar las pilas para comenzar un nuevo año, ya sea laboral, universitario o escolar.

El mejor amigo de las vacaciones puede ser un libro, ya que permite que tu mente se traslade a una realidad paralela, a un mundo mágico desconocido. Nos permite relajarnos, potenciar nuestra imaginación, conocer otras culturas, enriquecer nuestro lenguaje, entretenernos y olvidar, al menos por el tiempo que dure la lectura, los problemas cotidianos. La lectura nos da placer y esto se debe a que al leer por gusto (esto es clave) liberamos dopamina y serotonina, ambas sustancias ligadas a la sensación de bienestar.

El problema es que en Chile los libros son caros, las buenas bibliotecas generalmente están en las grandes ciudades y muchas veces, al no tener orientación, cuesta dar con un libro o autor que nos "agarre" de inmediato.

Pero tenemos una buena noticia: ya no hay excusas para no leer, porque este verano los libros se irán de vacaciones contigo y podrás leerlos gratis. ¿Cómo? La Corporación Cultural Creamundos, encargada de fomentar la lectura en espacios no convencionales, tiene tres iniciativas veraniegas para acercar los libros a los principales lugares de vacaciones de los chilenos.

“En la medida en que hemos ido desarrollando este proyecto, hemos descubierto que las vacaciones son un buen momento para que las personas aprovechen este tiempos de recreación para poder acceder a la lectura con un fin más ligado al goce de leer. Hay mayor tiempo disponible. Y nos dimos cuenta que cuando uno está de vacaciones, comienza a leer todo lo que está disponible, por lo tanto el plantear una biblioteca de playa o un punto de lectura, permite el acceso a libros de una variedad de géneros y así las personas pueden descubrir algo que los ligue y los acerque a la lectura permanente”, nos cuenta Fabián Retamales, director de Creamundos.

1. Caleta de libros: lectura gratuita en la playa

Por tercer año consecutivo Creamundos lanza el programa “Caleta de Libros”, que consiste en habilitar puntos de préstamo de libros en distintas playas del litoral chileno con el fin de difundir la lectura acompañando a las personas en sus vacaciones.

Como nos cuenta el director, “el proyecto surge el año 2014 en dos caletas de pescadores que habían sido arrasadas por el tsunami del 2010: Iloca y Curanipe. Vimos que estos espacios estaban siendo reconstruidos en términos de infraestructura, y quisimos hacer un aporte desde el ámbito cultural, asociándonos con los sindicatos de pescadores, quienes nos facilitaron un espacio para poder hacer una instalación de dispensadores de libros, vincularnos con las escuelas locales para dejarles la implementación a ellos, para que sean utilizadas luego durante el año. El resultado fue excelente, la gente sacaba alrededor de 40 libros diarios, mucho mayor al número de préstamo que tenían las bibliotecas, por lo que decidimos ampliarnos a otras regiones y playas del litoral”.

Este 2016 ya se instalaron puntos de préstamo en Playa Grande (Cartagena), La Herradura (Coquimbo), La Lisera (Arica) e Iloca. Cada punto contará con más de 300 textos de los más variados géneros y formatos literarios para diferentes edades, seleccionados gracias a un diagnóstico territorial local a través del cual, junto a la colaboración de los consejos regionales de cultura, se determina el catálogo de lectura con autores locales o temáticas de interés de los vecinos, y que luego son los propios actores locales, como la municipalidad, quienes toman el proyecto y se hacen cargo de llevarlos a las bibliotecas, plazas y distintos espacios públicos para seguir generando actividades en relación a la lectura y a la cultura en general.

Además, en cada punto se realizan también otras actividades relacionadas a las realidades locales y a la oferta que generen los agentes artísticos o culturales de la zona, como cuentacuentos, talleres de grafiti, ilustración, comics, entre otras actividades, todas organizados por actores locales, convirtiendo el punto en un espacio cultural durante el verano y luego en el año en otras partes.

Para acceder a un libro, las personas deben dejar una foto o fotocopia del carnet de identidad y su número de teléfono. Esto les da derecho a llevarse gratuitamente los libros por la tarde o por un par de días. Fabián nos cuenta que ha funcionado muy bien, ya que al pasar los libros se les explica que luego esos libros serán usados durante el año por la comunidad local, por lo que se les asigna una responsabilidad a los usuarios que permite que los devuelvan en buen estado.

Por su parte, Fernanda Arrau, encargada de contenidos de Creamundos, agrega que el objetivo de este año es “crecer no solo en impacto, sino también en profundidad de contenidos. Tenemos un productor en cada región, que está coordinando una programación cultural diaria porque queremos que se presten libros, pero también que pasen cosas y que cada lugar tenga una voz propia”.

Leyendo sobre viajes, arriba del bus

Este verano se sumó una nueva iniciativa de difusión literaria que comienza mañana y que se llama “Un Viaje a la Lectura con Caleta de Libros” que consiste en habilitar puntos de préstamo de libros en 13 terminales de buses de la empresa Turbus a lo largo de Chile.

Un mediador especializado contará cuentos relativos a viajes y vacaciones, se realizarán cuentacuentos para los niños y se les entregarán regalos con el fin de incentivar la lectura; y por otro lado, los usuarios podrán tomar prestados los libros de la estación, y luego devolverlos en el mismo bus.

Los terminales beneficiados con la actividad serán los de Iquique, Antofagasta, Copiapó, Pichilemu, Pelluhue, Talcahuano, Villarrica, Valdivia, Puerto Montt, Arica, Coquimbo, Cartagena y Licantén.

Al respecto, el gerente de Comunicaciones de Turbus, Victoriano Gómez, comentó que estas iniciativas “dan cuenta de nuestro interés por vincular el viaje con el mundo de las letras, la imaginación y la cultura”, y que “al ofrecer un pasatiempo tan enriquecedor como la lectura, el viaje trasciende el concepto de ir de un punto a otro, transformándose en un viaje de la imaginación, que es libre y propio”.

Lee los mejores cuentos de los propios viajeros y anímate a escribir el tuyo

Además, en 13 buses Turbus se distribuirá el libro Cuento Kilómetros. Un viaje a la lectura, editado por la Corporación Creamundos, que reúne los mejores cuentos de viajeros chilenos que fueron seleccionados del Concurso Cuenta Kilómetros que realizan estas dos entidades, y que como dice el prólogo, “narran viajes que van desde historias sobre una bicicleta, hasta paseos en automóvil y escenas en que un tren, un caballo o un bus son el centro más vivo del relato. Otros contaron cuentos de la vida misma, con miradas al pasado y giros al presente o al futuro. Decenas no mencionan caminos ni líneas férreas, pero sí consideran que la vida es un viaje”.

Los textos se dispondrán en los recorridos que van desde Santiago hacia San Pedro de Atacama, Caldera, Valdivia, Pucón y Puerto Montt.

Victor Ide Benner, gerente general de Turbus, cuenta que “decidimos que uno de los libros destinados al viajante fuera, justamente, uno realizado de manera colectiva y como resultado de un concurso, escrito por ciudadanos de todo el país, quienes comparten sus experiencias de viajes reales o ficticios, dando forma a un texto de gran calidad literaria.

En la versión del concurso del 2015 se recibieron más de 580 cuentos, de todas partes del país y de autores de todas las edades, y los relatos fueron evaluados por un jurado de especialistas compuesto Jaime Collyer, Alejandra Costamaga y Fernanda Arrau, todos con amplia experiencia en el mercado editorial desde diversos ángulos, quienes seleccionaron los 10 mejores.

Este año aún no hay fecha para postular al Concurso, pero pronto se comunicará, porque la idea de Cuenta Kilómetros es entregar un viaje Premium con lectura de viajes y realizar un concurso para descubrir nuevos talentos y nuevas historias interesantes y entretenidas para contar a los viajeros.

¿Tú lees en las vacaciones?