Todos usamos bolsas plásticas. Cuando vamos al supermercado o a comprar cualquier cosa en una tienda. Las usamos por pocos minutos, y sin embargo su degradación tarda entre 150 y 500 años, causando un terrible daño al medio ambiente.
Sin embargo Pucón es el primer municipio de Chile que intentará revertir esta situación. Para ello, trabaja en una ordenanza para erradicar de una vez por todas las bolsas plásticas del comercio local. Todo en un plazo de dos años.
En Pucón son el principal desecho que llega al vertedero local. Según estudios del municipio, sus 21 mil habitantes consumen un promedio de 1,5 bolsas al día, lo que suma 31.500 unidades diarias. 11,5 millones de bolsas al año. Esto, sin considerar los turistas que en temporada alta pueden llegar a 10 mil.
Se podría pensar que el mismo comercio pondría trabas a esta medida, pero por lo menos en Pucón, la mayor cadena local, Eltit, aseguró que están dispuestos a colaborar con la iniciativa.
La municipalidad de Pucón lo realizará de manera gradual. En etapas de seis meses y en un total de dos años.
1. Primero harán una campaña de difusión de seis meses, para promover el uso de bolsas de género o biodegradables y su entrega a los turistas.
2. Luego, también durante 6 meses, se permitirá la entrega de hasta tres bolsas plásticas por persona en los comercios.
3. Luego dos bolsas por igual período.
4. Se entregará sólo una bolsa durante seis meses más. Cuando acabe esta etapa, se prohibirán en forma definitiva las bolsas plásticas en todos los comercios del balneario.
Este modelo se está haciendo hace varios años en distintas partes del mundo, de diferentes maneras, algunas más drásticas y otras, como la del Municipio de Pucón, más graduales.
La iniciativa de Pucón, fue imitada de localidades turísticas en Argentina, como San Martín de Los Andes, que en un sistema similar dejó las bolsas de plástico de lado. En esas localidades se cobra alrededor de $12.500 pesos chilenos por cada bolsa que se entregue fuera de la normativa. Una multa similar es la que se quiere implementar también en Pucón.
Irlanda comenzó con esta idea en 2002, implementando su PlasTax, un impuesto del 20% para las personas que usaran bolsas plásticas en los comercios.
Por esa época, se usaban alrededor de 1,3 mil millones de bolsas plásticas al año. Al aplicar esta medida, el uso de bolsas cayó en un 90%, a los pocos meses.
A pesar de que los impuestos que se recaudaran iban directamente a un fondo de protección ambiental, la mayoría de las personas prefirieron no pagarlo. En vez de eso, comenzaron a usar bolsas biodegradables.
Escocia también se sumó a esta iniciativa y comenzó tiempo después a cobrar también un valor por cada bolsa de plástico que uno usara. Hoy, varios países y ciudades cobran por sus bolsas como España, Buenos Aires, Alemania, Israel y el Reino Unido.
Ese mismo año 2002, Bangladesh fue más radical que Irlanda y prohibió las bolsas de plástico, luego de darse cuenta que su uso había sido el causante de las graves inundaciones de 1988 y 1998, que sumergieron a dos tercios del país, debido al bloqueo de desagües.
Italia también fue radical. A partir del 1 de enero de 2011 todos los negocios, supermercados y hasta los puestos callejeros de ventas debieron dejar de entregar sus mercaderías en bolsas de plástico, y fueron sustituidas por equivalentes realizadas de material biodegradable o de papel.
Por otro lado, San Francisco fue la primera ciudad norteamericana en 2007 en prohibir las bolsas plásticas en las grandes cadenas de supermercado. Desde ese entonces, muchas ciudades con bahías adoptaron políticas parecidas.
Este año, las autoridades de la ciudad decidieron extender la prohibición a todas las tiendas y restaurantes. Por eso, desde el primero de octubre las bolsas de plástico en las bahía de San Francisco, será parte de la historia.
Guardar las bolsas de género biodegradables. En los supermercados las venden y sus precios fluctúan entre los $25o pesos, a $500 pesos. Pero también pueden obtenerse de manera gratuita.
Son muchos los locales comerciales que están entregando en vez de bolsas plásticas, bolsas de este tipo. Sólo es cosa de guardarlas e ir utilizándolas. Es difícil cuando tienes que hacer las compras para muchos días en el supermercado, pero cuando se va a comprar un par de cosas, no cuesta nada llevar una de estas bolsitas y rechazar la bolsa plástica.
También pueden usarse los carros de compra (esos estilo de feria), para ir al supermercado y cargar cantidades más grandes.
Si uno se las ingenia, puede de a poco, ir dejándo las bolsas plásticas, o al menos, hacerse el hábito de utilizarlas cuando sea sólo demasiado necesario.
¿Crees que una iniciativa como la de Pucón podría funcionar en tu ciudad? ¿Estarías de acuerdo con implementarla?