Más de 2.500 rostros del mundo ya se suman al catálogo Humanae, demostrando que no hay blancos ni negros y que nuestro lápiz color "piel" de la infancia estaba completamente equivocado. Es el proyecto de la fotógrafa brasileña Angélica Dass que busca dar a conocer la enorme riqueza y variedad de colores que existen las pieles y busca crear conciencia de la discriminación racial que aún subyace en nuestros tiempos.

Angélica proviene de una familia multiracial, por eso a ella nunca le hizo mucho sentido la clasificación de colores de piel en las personas. Era demasiado básico clasificar a las personas en amarillos, blancos, negros o rosados y por eso decidió mostrar que hay tantos colores de piel como identidades en el mundo y que la diversidad humana es mucho más rica.

Su proyecto Humanae está ahora en Chile como parte del ciclo programático %Otros, el valor de la diferencia, que reflexiona sobre temáticas como la diversidad y la igualdad en el Centro de Extensión (Centex), del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (Valparaíso). Se expondrá hasta el 10 de junio con una selección de alrededor de 200 retratos de los miles que hoy componen esta gama cromática humana mundial.

"El ciclo nos abre la mirada hacia las distintas formas de discriminación y prejuicios que observamos en la sociedad. De alguna forma, la mayoría de las personas discriminamos por algo y todos somos discriminados por cosas distintas (color de pelo, color de ojos, color de piel, equipo de fútbol favorito, hobbies, etc.). Humanae despeja al menos uno de esos criterios de discriminación al homologar los tonos de piel de los seres humanos a la escala Pantone, igualándonos e invisibilizando la diferencia", dice Rocío Douglas de Centex.

El color de los chilenos

El 28 de marzo, Angélica Dass fotografió a cientos de chilenos que pasaron a formar parte de esta gran pantonera de colores junto a rostros de España, Suiza, Noruega, Corea del Sur, Etiopía, Brasil, Francia y Estados Unidos. Como en todos los otros casos, la punta de la nariz de cada persona determinó el color específico de la escala cromática y demostró la gran diversidad existente en nuestra sociedad.

^{Imágenes: Cortesía de Angélica Dass}

"Lo más curioso ha sido el interés de los asistentes por saber su Pantone (…) Angélica Dass no deja a nadie fuera, pues justamente su proyecto solo se terminaría si retratara a toda la humanidad. Es por eso que Humane es un proyecto en desarrollo, particularidad que también convocó a las personas, pues eso les permite ser parte de un proyecto mayor, de escala mundial", dice Douglas.

^{Imágenes: Cortesía de Angélica Dass}

"Independiente del color de piel, o las características físicas particulares de cada uno, somos todos iguales. En las imágenes de Humanae no puedes saber de qué país es la gente, dónde vive, de qué religión es, si son pobres o ricos, te ayuda a ver que los prejuicios no necesariamente se cumplen", asegura Rocío.

OTRAS MUESTRAS DE %OTROS EL VALOR DE LA DIFERENCIA

VER LEVE la mirada del otro: Muestra el resultado de Galería Leve, un proyecto del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes en conjunto con Techo de Valparaíso y coordinado por la artista Anamaría Briede, que tiene como objetivo principal la creación de actividades artísticas de vinculación para acercar el arte contemporáneo a comunidades alta vulnerabilidad y potenciarlo como un agente de desarrollo social.

Estado Público: Con la idea de recuperar un lugar abandonado y volverlo un punto de encuentro para los ciudadanos, las artistas Guisela Munita y Ángela Ramírez instalaron una plaza en el edificio ubicado en la calle Santiago Severín esquina Santo Domingo de Valparaíso. La muestra presenta el registro audiovisual de la intervención.

Diario de un Toma: Expone las ilustraciones del libro homónimo inspirado libremente en la Revolución de los Pingüinos de 2006. De la escritora Lola Larra y el ilustrador Vicente Reinamontes, narra la historia de un colegio al sur de la Alameda que está en toma. 

¿Crees que Humanae nos puede ayudar a cuestionar los prejuicios raciales?