Los
efectos de la globalización se observan no solo en la diversidad de colores o acento de un país, sino también en algo tan corriente como el anaquel de tu supermercado más cercano. Fíjense en su próxima visita, parece reunión de la Naciones Unidas: plátanos de Ecuador, carne de Brasil, té de India, café de Colombia, chicles de Polonia.
Una genial campaña publicitaria de
Edeka, la cadena minorista más grande de Alemania, busca representar el valor de esta diversidad de una forma muy original: ¿qué queda en un supermercado si no hay diversidad? Se trata de un claro guiño a las posturas xenofóbicas de diversos partidos políticos europeos, y donde ni siquiera Alemania, país conocido por su apertura a la inmigración, se salva.
Pobreza sin diversidad, literalmente
Visualmente poderosa, la campaña se realizó en uno de sus supermercados de Hamburgo. Allí se retiró todo producto de origen extranjero, para dejar solo lo 100% alemán. Aquí los resultados:
La acción también fue acompañada de frases como: "
Este anaquel lo demuestra: Alemania sería más pobre sin diversidad", "Así de vacío es un anaquel sin extranjeros", "Este anaquel, sin diversidad, es bastante aburrido" y "Nuestra selección (de comidas) tiene hoy fronteras".
Así explicó la cadena de supermercados su llamativa campaña: "Edeka representa variedad y diversidad. En nuestras tiendas vendemos numerosos productos que son producidos en distintas regiones de Alemania. Pero solo junto a productos de otros países es posible crear la diversidad única que nuestros consumidores valoran".
Si bien se trató de una
estrategia de marketing, las reacciones en redes sociales dentro de Alemania han sido mayormente positivas, siendo destacada incluso por políticos germanos. Julia Klöckner de la Unión Demócrata Cristiana, la llamó "una acción inteligente sobre la que reflexionar".
Otros usuarios criticaron la pobreza que exhibe el supermercado en productos nacionales, lamentando que no se apoye lo suficiente a la industria regional.
El timing no es casualidad. Falta cerca de 1 mes para que millones de alemanes vayan a las urnas a escoger a sus nuevos miembros en el Bundestag (parlamento federal) y a su nuevo Canciller (esta última elección es de carácter indirecto).
Si bien los candidatos principales al cargo, Angela Merkel y Martin Schulz, son totalmente pro-europa y pro-inmigrantes, existen otros movimientos de ultraderecha, como el partido Alternativa para Alemania, que no lo consideran así, y que
podrían contar con representación en el Bundestag por primera vez (en 2013 les faltó un 0,3% de votos totales para sentarse en el senado).
También toma relevancia por
protestas del pasado domingo, en Spandau, donde 39 neo-nazis fueron arrestados en una manifestación de 500 personas quienes recordaban el aniversario de la mano derecha de Hitler, Rudolf Hess.
¿Cómo crees que quedaría un supermercado chileno si lo hiciera?
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