*Esta nota fue originalmente publicada en 2013.
"¡Me estás hablando chino!" solemos decir cuando no entendemos nada. Y no es de extrañar, con 20 mil caracteres, cada uno asociado a un concepto, el que además varía según el símbolo que le acompaña, aprender el idioma del gigante asiático parece una pesadilla. Sin embargo, con una presencia china cada vez mayor a nivel mundial, se vuelve relevante entender al menos un poco del idioma de más de 1.350 millones de personas.
Shaolan Hsueh era de Taiwan y claramente no tenía dificultades para entender su propio idioma. Pero una vez viviendo en Inglaterra, formó una familia y recién ahí se dio cuenta de lo complicado que era para el mundo occidental entender la escritura china. A sus hijos les era casi imposible aprender y buscó muchos métodos diferentes para que esos miles de conceptos entraran en su memoria. Pero nada.
Hasta que un día dio con la solución: unir cada signo gráfico chino con su significado en una ilustración. Así nació Chineasy, un sistema para aprender lo básico del lenguaje chino y acercar dos mundos separados por el lenguaje. ¿Quieres comprobar su eficacia? Sigue leyendo y verás lo bien que funciona.
Como dijimos, el lenguaje chino tiene 20,000 caracteres. Eso porque a cada concepto le asignan uno, a diferencia de nuestro lenguaje, que con 28 letras hace las combinaciones para formar palabras. Ahora bien, un chino común no conoce todos los caracteres de su idioma, así como nosotros tampoco conocemos absolutamente todas las palabras de nuestro vocabulario.
De hecho, en la alfabetización estándar de China se usan unos 1000 caracteres y en la básica unos 200, según Shaolan. Chineasy te enseña esos doscientos.
Con eso cualquier persona es capaz de entender un 40% de las escritura china básica. Así, de una forma rápida y simple puedes reconocer los principales conceptos de la escritura milenaria china. También cada carácter tiene su Pinyin, el sistema de transcripción fonética del chino mandarín, que indica cómo debe ser pronunciada la palabra.
Aunque como idioma el chino y el japonés son muy diferentes, comparten una característica común: la escritura.
En Japón utilizan diferentes escrituras: El alfabeto latino o romaji, los silabarios hiragana y katakana y, muy especialmente, el Kanji, una adaptación de la escritura china al sistema japonés moderno. Aunque la pronunciación y gramática cambiaron al importarlo, los conceptos asociados a cada símbolo son idénticos, por lo que conociendo el significado de cada uno, es posible deducir al menos el concepto básico de un cartel o palabra.
La ilustración es lo principal. Cada signo gráfico tiene su propia imagen asociada, para que nuestra mente relacione líneas y significado automáticamente, lo que lo hace muy simple. Observando las tarjetas o un libro es posible estudiar y traducir cientos de expresiones chinas. Pero también hay una forma más elaborada de aprender a partir de eso.
Hay que pensar en cada signo gráfico como si fuera un bloque. Estos son los radicales. A través de la unión de bloques, se construyen conceptos más complejos. Por ejemplo: un signo significa “persona”. Sin embargo al juntar “persona” con “boca”, el significado es “población”. Poco a poco, a través de los caracteres con sus ilustraciones, es posible ir entendiendo cómo armar nuevas palabras y frases a partir de los mismos conceptos, sin demasiado esfuerzo. Además, se gana una comprensión más profunda de las influencias históricas y culturales detrás del vocabulario y escritura.
En Chineasy se comienza con 8 bloques para combinar. Son elementos básicos que permiten crear rápidamente cientos de compuestos y frases formadas por dos o más bloques de construcción y compuestos.
¿Qué tipo de chino enseñan? Es una mezcla de formas simplificadas y tradicionales. Su creadora insiste en que no tiene importancia que sea así, porque lo hace más simple y además las diferencias de lenguaje chino a nivel básico no son demasiado importantes. Es como la diferencia entre la ortografía británica y la estadounidense, explica Hsueh.
Los 8 bloques básicos: Fuego, árbol, sol, luna, persona, boca, puerta y montaña.
Otros símbolos: Escudo, tigre, insecto y madre.
Este es un ejemplo de un "compuesto", donde los símbolos de árbol (que duplicado significa "bosque") y fuego, se unen para crear un concepto más complejo.
Este es el caso de una frase breve o parte de ella, donde no se unen dos signos, sino que se escriben juntos para explicar otro concepto o idea. En este caso: "Puerta de madera".
Con este método, cada signo gráfico incluirá: traducción, pronunciación pinyin, frecuencia de uso, estilo de signo, descripción.
La idea es que el método pueda abarcar cada vez más caracteres, por lo que se busca que la colección de ilustraciones crezca a 1000. "Veo a la fusión de estas dos culturas, Oriente y Occidente, como un instrumento para la creación de un mundo más alfabetizado culturalmente", dice Shaolan a Fast Company. La creadora de Chineasy aclara que si bien este método no enseña a hablar chino en sí, da las herramientas básicas para introducirse en un mundo que nos es desconocido.