Después de más de un año de espera, intentos de suplir tu adicción con otras series (jamás con el mismo resultado) y de nutrirte de tráilers que lo único que hacían era incrementar tu ansiedad, ha llegado el gran día. En este fin de semana bajo cero, podrás preparar el perfecto escenario para acostarte a ver -con estufita prendida, plumón y cafecito- el comienzo de la séptima temporada de Game of Thrones porque, como bien sabes, winter is here (¡y con escándalo!).
¿Con quién se había aliado Daenerys?, ¿Arya sigue ciega?, ¿por qué fue la Batalla de los Bastardos?, y esa mega explosión con fuego valyrio, ¿a quién mató? Hoy en El Definido queremos desempolvarte el cerebro para recordar en qué habíamos quedado al finalizar la temporada seis, un mini resumen que te vendrá muy bien.
Para dejar todo claro como el agua, recordemos cómo se fraguaron las tres fuerzas que se disputarán el Trono de Hierro durante esta temporada:
El galán de GOT fue proclamado durante la quinta temporada como Lord Commander de la Guardia de la Noche. Pero su decisión de confiar en los salvajes, lo llevó a ser asesinado por sus propios hombres, al más puro estilo de Julio César.
Al comenzar la sexta temporada, Jon Snow estaba muerto en la historia y en los tristes corazones de su fanaticada, quienes confiábamos en los poderes de la sacerdotisa del fuego, la pelirroja Melisandre, para devolverlo a la vida. Y lo logró, Snow abrió los ojos y castigó a los culpables de su muerte, y esa noche todos volvimos a dormir en paz.
Durante la temporada, Jon se reunió con otra colorina, su hermanastra Sansa, quien por fin había logrado escapar de las garras de su sádico esposo, Ramsay Bolton, desde Winterfell (Invernalia suena tan feíto…).
Entonces, nuestro Lord Commander descubrió que los Bolton tenían a Rickon Stark, el más pequeño del clan de los lobos, que ya se nos había perdido en la historia hace un buen rato. Entonces Jon reclamó Winterfell y a su hermano con un ejército compuesto por algunos señores del norte (entre ellos, la adorable Lyanna Mormont), salvajes y los Caballeros del Valle, quienes llegaron a última hora gracias a la debilidad de Little Finger por Sansa. Ésta fue conocida como “La Batalla de los Bastardos”, pues se libró entre las fuerzas de Snow, supuestamente bastardo de Ned Stark (aguántense un cachito…) y las de Ramsay Bolton, bastardo de Roose Bolton.
Jon Snow y sus aliados ganaron la batalla después de una de las secuencias más impactantes de la serie, pero lamentablemente no pudo salvar al pequeño Rickon, quien murió luego de que Ramsay le disparara por la espalda. Finalmente, vimos cómo el bastardo de los Bolton murió en su ley, siendo devorado por sus propios perros, mientras Jon era proclamado, “¡The King in the North!”. Sansa, por su parte, se dio cuenta de la mirada preocupada de Little Finger cuando Jon es vitoreado por todos. Claramente, Snow es un impedimento para sus (absurdas) ambiciones de llegar al trono junto a la pelirroja Stark.
Así queda fraguada la primera fuerza que disputará el Trono de Hierro durante la séptima y octava temporada. Y aquí la aclaración de “aguántense un cachito”. En esta temporada nos fue revelado uno de los grandes secretos de la serie (que algunos ya sospechaban): Jon Snow no es bastardo de Ned Stark, sino hijo de su hermana, Lyanna Stark, con alguien que posiblemente es Rhaegar Targaryen, el hermano mayor de Daenerys. De confirmarse este último dato, Jon sería sobrino de la Madre de los Dragones, primo de los hermanos Stark y (momento solemne) legítimo heredero al Trono de Hierro.
Veamos ahora qué es de Daenerys Targaryen, Madre de Dragones y rubia populista (como dicen algunos), quien encarna una de las fuerzas que más clara ha tenido su pretensión al Trono de Hierro desde los inicios de la serie.
Recordemos que al final de la quinta temporada, Daenerys había escapado de Meereen, tras el ataque de los Hijos de la Arpía (esa banda de guerrilleros que atacaba en las calles y que eran nobles de Meereen). Cuando, cabalgando en las espaldas de Drogon, llegó hasta un paisaje desolado, fue capturada por los Dothraki, ese grupo de guerreros al que pertenecía su marido muerto, Khal Drogo, y que vimos en las primeras temporadas. Durante la sexta temporada ella debió recordarles todo el cuento, que ella era Khaleesi, la esposa del líder, que hablaba su idioma y que debían tratarla como tal. Pero los Dothraki le hicieron “tapita” y le dijeron que como su marido estaba muerto, se tenía que ir a una suerte de convento. Todo mal, porque las ambiciones de nuestra Madre de Dragones se vieron bien frenadas esta temporada. Afortunadamente, Khaleesi logró engañar a los Khals y terminó quemando su templo sagrado y matando a un gran número de ellos (en esta épica escena que nos recordó esta otra, cuando nacen sus “tiernos” dragoncitos). Si se nos había olvidado que Daenerys también es llamada “la que no arde”; la secuencia nos refrescó la memoria.
Entonces regresó a Meereen y reprimió un ataque de los amos de los esclavos, pues hay que recordar que ella los había liberado. Ya instalada, comenzó a buscar aliados para cumplir su gran objetivo de vida: volver a Westeros (el continente ubicado al oeste, aquí un mapa del mundo conocido) para ocupar el Trono de Hierro, porque ella se siente la legítima heredera del reino, siendo hija del llamado Rey Loco.
Todos estos hechos desembocan en la heroica escena que dio fin a la sexta temporada (aquí puedes verla), y que revela los finísimos aliados con que contará la Madre de Dragones para lograr su cometido: Daenerys, con sus tres dragones ya maduros, va rumbo al poniente al mando de una enorme flota proporcionada por los hermanos Greyjoy, Yara y Theon, quienes quieren que Khaleesi los ayude a liberar las Islas de Hierro de su tío, Euron. La acompañan los cientos de esclavos de Meereen, también con sus barcos, y los Dothraki, quienes han sido finalmente sometidos. Como aliados también tiene al inteligente (y que sólo trabaja para sí mismo) de Varys, y al diplomático Tyrion Lannister, que poco cuento tuvo durante esta temporada. También hay que recordar que lo que quedó de los Tyrell después del desastre de King´s Landing (aguántense otro cachito), también pertenece a este bando ahora, aunque no aparecen en la escena. Así, ya queda armada la segunda fuerza que disputará el trono, y que veremos cómo se enfrenta a Jon y compañía, sobre todo cuando ambos se enteren que están emparentados.
Y ya llegamos al tercer frente de la lucha, “el más despreciable de todos”, y que se encuentra en el corazón de los Siete Reinos, King´s Landing. Cersei, más mala que nunca, está logrando su cometido sin importar las consecuencias, incluso habiendo perdido ya a sus tres hijos (como le vaticinó una maga en su niñez).
En la quinta temporada, asistimos a su caminata de la vergüenza, cuando el Gorrión Supremo la obligó a avanzar desnuda por la ciudad como penitencia a sus pecados de “mentira y fornicación”, en una de las mejores interpretaciones que hemos visto durante la serie.
Y así llegó a la sexta temporada, llena de rabia, venganza y con más sed de poder que nunca. ¿Qué hizo para hacerse con el poder (y aquí el segundo cachito que se estaban aguantando)? Pues nada mejor que hacer volar por los aires a todos sus enemigos, utilizando las reservas de fuego valyrio que se encontraban bajo King´s Landing, en una de las escenas más memorablemente montadas de Game of Thrones. Mientras se desarrollaba el juicio a Loras Tyrell en el Gran Septo de Baelor, hizo estallar todo con el poderoso fuego verde, matando entre muchos otros a Margaery Tyrell, esposa de su único hijo vivo, a Loras Tyrell y al Gorrión Supremo, quien ya se había convertido en uno de sus grandes enemigos.
Pero sus actos tuvieron el peor resultado para una madre sobreprotectora como Cersei: su ingenuo hijo Tommen Baratheon, rey de los Siete Reinos, se suicidó lanzándose por la ventana, al enterarse de la muerte de su adorada Margaery. Cersei Lannister fue entonces coronada como reina, lo que coincidió con la llegada de su hermano (y amante) Jaime Lannister. Sin embargo, es muy posible que la destrucción en que encontró la ciudad y la muerte de Tommen, hagan abrir los ojos a Jaime, y se produzca más que un conflicto entre ambos.
La tercera fuerza en disputa entonces la encarna la reina de los Siete Reinos, su hermano -que está por verse si continuará siendo su fiel aliado- y lo que queda de King´s Landing.
Como sabemos, Game of Thrones es una serie que se caracteriza por su inmensa cantidad de personajes y sus complejas tramas. Aquí algunos que faltan y bueno, los white walkers.
Arya Stark: La niña menor de los Stark ya no es nada pequeña, es más, es toda una guerrera y ha tenido un duro adiestramiento. Durante las últimas temporadas la vimos entrenándose en Braavos (en Essos), en la Casa de Blanco y Negro, el templo del Dios de Muchos Rostros. Recordemos que en la quinta temporada, Arya asesinó de manera brutal al guardia real Meryn Trant, quien estaba en su lista de los más odiados por haber asesinado a Syrio Forel, su maestro de espadachín (aquí la lista completa de Arya). Como castigo fue cegada, y durante la sexta temporada esta extraña secta le encargó la muerte de una actriz que ella se negó a asesinar, pues le tomó algo parecido al cariño. Como no cumplió su tarea, hicieron lo posible por matarla, pero Arya superó con destreza a su rival y decidió volver a Winterfell, para saber qué es de su aporreada familia.¿Cómo cerró la temporada pasada? Pues cortando la garganta de otro de los personajes de su lista, Walder Frey, máximo responsable del desastre de la Boda Roja.
Bran Stark: El más místico de los Stark, el hermano paralítico que ya es todo un adolescente, reapareció en la sexta temporada después de su ausencia en la quinta, y nos ha dado varias escenas importantes. Después de un riguroso entrenamiento, se ha convertido en el nuevo Cuervo de Tres Ojos, con la capacidad para mirar el pasado y el futuro, brindándonos suculentos flashbacks que han aclarado varias tramas, como la procedencia de Jon Snow. Y bueno, la escena reina de los memes, que nos explicó por qué Hodor se llama Hodor, protagonizando una adrenalínica persecución con los white walkers pisándole los talones. En su escape junto a Meera Reed, Bran se encontró con su tío perdido desde la primera temporada, Benjen Stark, quien está en un curioso estado intermedio entre ser humano y white walker, después de ser atacado por estos últimos y salvado por los Hijos del Bosque. Benjen los conduce hasta los pies del Muro, pero él no puede pasar debido a su condición.
Sam Tarly: Uno de los personajes que más cariño ha despertado en los fans, es sin duda Sam, el fiel amigo de Jon. Durante esta temporada, vimos como por fin se prepara para cumplir su sueño, convertirse en Maestre, acompañado de su amada Gilly y su hijo, por quienes ha tenido más de un problema con su familia. Lo interesante que queda colgando para esta temporada, es que Sam robó una espada de su padre que es capaz de matar white walkers, llamada Heartsbane, lo que de seguro será de importancia en las batallas que están por venir.
White Walkers: Y obviamente nuestros odiados zombies blancos, quizás más malos que la propia Cersei, quienes prometen ser el enemigo real en las próximas temporadas. Durante la sexta los vimos más organizados que nunca y con ciertos personajes que destacan como líderes del grupo. Un ejército inmenso de ellos avanza sin tregua hasta el Muro y nos deja expectantes sobre lo que ahí sucederá.
¿Ya quedaste más o menos al día? Si te faltan datos te aconsejamos ver este resumen de ocho minutos o hacer preguntas directas en este enlace de Facebook, donde un bot de la empresa británica Catch Digital es capaz de responder las dudas que tengas sobre la serie. Aunque ojo, sólo responde en inglés y hay que tener en cuenta que es una máquina, ¡no lo sabe todo!
Y que no se te pase: este domingo, en HBO a las 22 horas, estreno de la séptima temporada de Game of Thrones.