Imagínate la siguiente escena: vas a cenar a un restaurante, pides una sopa y cuando estás a punto de comerla te das cuenta de que un saltamontes está flotando en ella. ¿Qué es lo primero que se te viene a la cabeza? Que el bicho se coló en la sopa, que la cocina es sucia y el lugar, ¡pésimo! Eso sin dejar de lado una queja enorme en contra del lugar.

Pero, como algunos sabrán, si bien en Chile o en gran parte de Occidente esto es realmente asqueroso e inaceptable, en muchos países alrededor del mundo este saltamontes sería el complemento perfecto para un plato de primera, pues comer insectos es completamente normal, e incluso hay grandes recetas de platos que son considerados deliciosos.

Insectos en “ricas” dietas

¿Se acuerdan la primera vez que alguien les contó sobre el Sushi? Las ganas de probarlo probablemente fueron pocas. ¿Pescado crudo? ¡Ug! Incluso probablemente más de alguno tuvo comerlo en reiteradas ocasiones antes de poder agarrarle el gusto. Puede que con los insectos suceda prácticamente lo mismo, ¿cómo así?

Eso es lo que explica Peter Smithers, investigador asociado de la Universidad de Plymouth, que se ha dedicado a enfocar su trabajo en bichos comestibles. Según él, explicarles a las personas de una manera entretenida e informativa que los insectos se comen en varias partes del mundo, haría que probablemente muchos tomaran la iniciativa de probarlos. A fin de cuentas, tiene que ver con un prejuicio (este producto lo comprueba).

Y la idea es ver esta comida más allá de cómo una gran solución al problema de la hambruna (que realmente podría combatirla), pues cuando se habla de considerar a los bichos como alimento, no se refiere específicamente a esos programas televisivos de supervivencia en medio de la selva.

De hecho, Kitchen Grub, es el primer restaurant en abrir en Reino Unido, e incluye saltamontes y otros insectos en su carta. Sin embargo, esto que puede resultar raro aquí y en muchos países occidentales del mundo, es una gran realidad en otros en donde el crecimiento de la población va en aumento y que existe una insuficiencia de carne o pescado, esto sin dejar fuera aquellos en que es una tradición.

Es así entonces como en el sureste de Asia, las hormigas son servidas con arroz, en Brasil son mezcladas con chocolate y en China con sopas. En Tailandia, los saltamontes se sirven fritos y en México, con ají y limón. ¡No suena tan mal!

Es una lista realmente larga de países que lo hacen, de hecho más de 1.900 especies de insectos han sido clasificados como fuente de alimentación y todavía forman parte de la dieta al menos 2.000 millones de personas mundo, según datos entregados por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Ahora bien, pongámonos en la situación de que de un día para otro tuvieras que cambiar tu dieta, por una 100% basada en insectos, ¿cómo sería?

Comer insectos por 30 días

Camren Brantley- Rios, es un estudiante estadounidense que escuchó que ésta sería la dieta del futuro y se le ocurrió nada más ni nada menos, que pasar un mes alimentándose de esa manera, comiendo bichos tres veces al día.

Según explica a la BBC, gusanos de harina, de cera y grillos, fueron la base de su dieta. Pero sin dejar de lado la oportunidad de probar las cucarachas- llegó a llorar mientras las preparaba- y se encontró sorprendido por lo ricas que sabían.

Al pasar un mes, el estadounidense logró terminar su experimento y, a decir verdad, sigue vivito y coleando. Comer insectos no le causó ningún problema en su digestión, e incluso logró persuadir a un par de amigos de seguir con la idea.

Pero, si bien comerlos finalmente no fue una dificultad, poder conseguirlos sí, ya que según explicó, tuvo que recurrir a internet para tener los ingredientes. No es tan fácil como sacarlos del jardín. Tuvo que llamar a diferentes proveedores y hacer un encargo que le llegó al correo, incluso llamó a criaderos encargados de suministrarle a los zoológicos, que los utilizan para alimentar a reptiles y animales de ese tipo.

En conclusión, su resultado fue exitoso, salió ileso y le gustaron. Al parecer, estos realmente podrían ser la alimentación del futuro, ¿te atreverías a probarlos?

Platos típicos con un aderezo especial

En Toronto (Canadá), se realiza año a año una Exhibición Nacional (CNE), la que se caracteriza por tener una gran variedad de alimentos y presentar una excelente gastronomía, donde la gente suele disfrutar en exceso lo que se sirve ahí. Sin embargo, siempre está presente el factor sorpresa que impacta y eso es lo que pasó en la última versión.

El chef y veterano de la CNE Mark Jackecki, presentó como su menú, tacos, rollos de primavera, hotdogs, smoothies, pie de limón, etc. Un poco aburrido, ¿no? Aún así causó revuelo en todo el evento. ¿Cómo logró cautivar con esa oferta tan clásica? Con artrópodos y gusanos.

Así es, porque todos esos básicos platos, estaban acompañados por una cubierta de bichitos y lo mejor de todo, parece que este “toque” es realmente espectacular, ya que la experiencia fue bastante exitosa. Bueno, esto lo pudieron disfrutar más bien los valientes que se atrevieron a probar la novedad, pues también se llenó de comensales asquientos que sólo se detuvieron a observar. Sobre el sabor, tenemos la opinión del experto:

“Personalmente creo que sabe un poco a nuez, pero un poco amargo. He escuchado decir que [los grillos] saben a semillas de sésamo y eso que no los estamos utilizando crudos, están tostados. A las personas les gustan las cosas crujientes y sabrosas, entonces no hay problema”, dice Jackecki.

¿Probarías un plato con insectos? ¿Crees que podrían convertirse en un plato exitoso en Occidente?