Estás en una importante reunión y tienes que recibir el llamado de tu jefe que se encuentra en el otro lado del mundo. Miras tu celular y ves que te queda un 1% de batería. Para variar se te olvidó traer el cargador. Drama.
Pero ¿y si te dijéramos que puedes recargar tu celular con un poco de sal y agua? ¡No, no sumerjas tu teléfono en ese vaso! Nos referimos a una nueva tecnología (o más bien, la adaptación de una tecnología existente a un formato más portátil): el cargador JAQ.
Este nuevo artefacto ha sido creado por un start-up llamado MyFc de Suecia, y no necesita ser conectado a un enchufe o fuente de electricidad para funcionar. “Estamos dedicados a adaptar y mejorar la tecnología de las pilas de combustible, para satisfacer la demanda mundial de personas que necesitan cargadores que no se carguen con enchufes convencionales (los de la pared). Esto lo hacemos con el fin de proveer a nuestros clientes con poder portátil para que puedan cargar su artefactos cuando quieran”, dice el CEO de MyFc, Björn Westerholm.
El cargador JAQ pesa 180 gramos, y es básicamente una especie de funda rígida en la cual se insertan cartuchos con forma de tarjeta que contienen agua con sal, los que son desechables. Estos son llamados los Power Cards. Cada cartucho contiene suficiente energía para cargar completamente (o casi) cualquier teléfono móvil o tablet.
El proceso para generar energía, consiste en que el PowerCard se inserta en el cargador, generando una reacción química al entrar en contacto con las 10 celdas de combustible de hidrógeno, generando 1800 mAh de energía, los que se transfieren a tu teléfono vía USB. Se trata de la misma tecnología que utilizan los autos eléctricos a hidrógeno, con la diferencia de que estos últimos utilizan el hidrógeno y oxígeno como insumo y liberan vapor de agua.
La idea de la compañía es que los consumidores puedan llevar consigo varios de estos cartuchos para cuando se encuentren viajando por lugares desiertos o subdesarrollados, en donde no hay ningún acceso a fuentes de energía eléctrica. A diferencia de las baterías externas convencionales, que van perdiendo carga con el tiempo, este sistema permite obtener una carga completa sin importar el tiempo que haya pasado desde que se adquirió la tarjeta hasta que se utilizó.
El costo del cargador sería de 99 dólares aproximadamente y el costo de cada cartucho PowerCard sería de 2 dólares. En todo caso, la empresa planea vender multipacks de estos cartuchos para que sea más barato comprarlos en grupos. Otro modelo de negocio posible sería mediante suscripción, ofreciendo el producto a través de las compañías de teléfono, de modo que éstas subsidien el cargador para reducir su costo, pero luego te envíen una dosis mensual de PowerCards que se cargará a tu cuenta telefónica.
Además, los PowerCards, pretenden no ser nocivos con el medio ambiente, ya que están buscando que sean fabricados en un 100% de materiales reciclados y reciclables, aunque aún no alcanzan esa meta.
JAQ está disponible en tres colores distintos: blanco, negro y morado. Por ahora sólo se puede comprar en Suecia, pero este año la empresa hará el lanzamiento de este producto, en Dubai, Estados Unidos y China.
Raphael Mijenos y su hermana Aisa son de Filipinas, y ganaron un concurso de start-ups con una lámpara que se mantiene prendida con un vaso de agua y dos cucharadas de sal. La novedad es que esta lámpara también permite cargar teléfonos celulares. Te contamos de esta lámpara hace un tiempo aquí.
En el año 2012, la misma empresa sueca MyFc también había desarrollado un cargador de celulares llamado PowerTrekk, que podía recibir su energía utilizando agua con sal. La diferencia recae en que este producto tiene el objetivo de servir como cargador para actividades más outdoor, como campings o largas caminatas por la montaña. Además tiene un peso de 270 gramos, mayor que el del JAQ. Otra diferencia es que utiliza discos o pucks reutilizables que utilizan un compuesto llamado silicio de sodio. En este caso, uno mismo puede cargar este artefacto con agua.
Otro cargador que utiliza una mezcla de sal y agua para producir su energía es el GMAG, creado por la empresa Green Initiative. La diferencia es que este era un cargador para pilas recargables AAA, AA, C y D.