En la era de la redes sociales y la hiperconexión, cada vez es más difícil desconectarse. Que Whatsapp, que el vecino, que la tía. No es que seamos necesariamente ermitaños, pero sí agradeceríamos de vez en cuando simplemente huir a la punta del cerro, y ojalá que ese cerro esté en otro planeta, de otra galaxia aún no descubierta, para que nadie, ni el telescopio de un científico voyerista, nos moleste.
Resulta que existen lugares ideales para ello, y, aunque lejanos, están a un solo vuelo de distancia. Estos son ejemplos de lugares extremos donde absolutamente nadie nos molestará, y donde podremos mandar al mundo y su civilización, con mucho respeto, "a la chucha".
A 40 metros de altura, en la región de Imereti, en el país de Georgia, se alza una iglesia donde seguramente nunca llegó el memo de que a Dios no le gustan las estructuras en altura.
La Iglesia de Máximo el Confesor, bautizada así por este personaje del cristianismo que, se cree, murió en la actual Georgia, se descubrió recién en 1944, año donde se logró escalar el pilar y se encontró el cadáver del último ermitaño que había habitado el lugar.
Se cree que el lugar por milenios tuvo un significado espiritual, primero ocupado por paganos para realizar ritos de fecundidad, y posteriormente cristianos, quienes construyeron la primera iglesia entre el siglo VI y VIII. Uno de los misterios que rodea al pilar es cómo, durante tanto tiempo, las personas subían y lograban abastecerse de comida.
Recién en 1993 el pilar tuvo un nuevo dueño, el monje ortodoxo Maxim Qavtaradze, con quien el Gobierno de Georgia trabajó para restaurar el lugar, cosa que se llevó a cabo recién a partir de 2005.
Tantos años de soledad le hacen a uno cuestionarse ciertas cosas ¿No, Maxim? Fuente: Daily Mail
El monje, previa cita, acepta la visita de solo turistas hombres, aunque los últimos reportes indican que la escalera de hierro que se solía usar está fuera de servicio.
Como si el país nórdico no fuese lo suficientemente aislado, una de sus islas llama la atención por su forma y por estar completamente deshabitada.
Elliðaey es una de las islas que compone el archipiélago de Vestman y cuenta con cero habitantes y un pabellón de caza con un sauna, una de las pocas actividades que se pueden hacer (se cazan aves), además de quizás jugar al frontón en la empinada tierra.
En serio, olvídense de jugar fútbol o cualquier cosa que involucre cosas que rueden. Fuente: First To Know
Existe el mito de que es propiedad de la cantante islandesa Björk, pero lamento arruinar la luna de miel: no lo es. Según la revista Iceland Review, existen dos islas con el mismo nombre y una efectivamente se discutió si podría darse a la cantante por sus servicios al país (finalmente no se hizo), pero no se trata de aquella ubicada en el archipiélago de Vestman.
Ha sido destacado en diversos foros y sitios de Internet como la fortaleza ideal en un apocalipsis zombie, y por buenas razones.
El edificio fue construido en el centro de una mina de carbón en 1953, y fue abandonado en 1964, desde entonces se alza impasible ante el tiempo.
Para aquellos ermitaños que aprecian también cierta cercanía con el mundo civilizado, el sitio Abandoned Kansai, indica que el edificio es "de fácil acceso por transporte público y más aún en auto. De hecho hay una cancha de fútbol y un parque para niños justo al lado".
Más curioso es que el Estado de Japón lo considera desde 2009 como un "edificio de importancia cultural", por lo que los alrededores se han pulido bastante, hasta parecer habitable:
¡Visite nuestra casa piloto! Fuente: Abandoned Kansai
Si quieren disfrutar de la soledad acompañados de la majestuosidad de los Alpes Julianos, no hay destino mejor que el Lago Bled, en Eslovenia. Específicamente hablamos de su isla, la única del país, que aloja una bonita iglesia barroca.
Según los habitantes de la zona, antiguamente (hablamos de hace más de un milenio) en el lugar se erigía el templo de Živa, diosa eslava de la vida y la fertilidad.
En el Mar del Norte, a 12 kilómetros de la costa este de Gran Bretaña, se encuentra un pequeño territorio que desde 1967 se autodeclara como Estado, aunque quizá "territorio" es un término demasiado generoso.
No es bonito, ¡pero es libre! Fuente: Wikia
El llamado Principado de Sealand es en verdad un fuerte antiaéreo construido en 1943 para proteger a los barcos ingleses de las minas descargadas por aviones alemanes, luego abandonado en 1956.
Once años después arribó Paddy Roy Bates, un inglés fundador de una radio pirata que buscaba emitir desde la plataforma de 0,025 kilómetros cuadrados. Nunca lo hizo, aunque sí le tomó cariño al lugar. En 1975 introdujo la constitución de Sealand, junto con sus propios símbolos patrios.
La historia del pequeño territorio no ha estado exenta de problemas. En 1978, un alemán de nombre Alexander Achenbach, auto-proclamado Primer Ministro de Sealand, asaltó con mercenarios la fortaleza cuando Bates y su esposa estaban de viaje, tomando como rehén a su hijo Michael. Fue acusado de traición y condenado a pagar una multa de 35 mil dólares (alrededor de 25 millones de pesos chilenos). En Alemania, Achenbach creó un gobierno en exilio llamado Gobierno Rebelde de Sealand, que hasta el día de hoy lucha por su supuesta autoridad sobre el territorio.
Si pasan por Sealand, se encontrarán con el Príncipe Michael, sucesor de Paddy, quien en 2012 murió afectado por Alzheimer.
Si prefieren acompañar la soledad con el sonido de la naturaleza, esta central eléctrica de madera ubicada en el estado de Colorado puede ser una buena opción.
La estructura fue construida en 1892, y abandonada en 1917. En julio cumplió tres décadas en el Registro Nacional de Sitios Históricos.
Eso si prepárense para visitante no deseados, porque es uno de los lugares más fotografiados del estado.
¿Buscando altura de miras? Entonces ideal cambiarse a este faro de 46 metros de altura ubicado en un peñasco de las islas Sorlingas, al suroeste de Gran Bretaña.
El edificio actual se construyó en 1858 sobre las bases de un primer intento que fue barrido por las olas, para sorpresa de nadie, once años antes.
Bishop Rock ostenta el récord Guinness de ser la isla más pequeña con una estructura humana en el mundo.
Tiene un problema de humedad eso sí. Fuente: In The Boat Shed
En el siglo XIII, cuando fuerzas a caballo turcas comenzaban a invadir Grecia, monjes ermitaños de la zona hoy conocida como Tesalia, construyeron hasta 20 monasterios en inalcanzables (al menos para los invasores) pilares de roca.
De los 20 hoy quedan 6, todos designados por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, los que componen el llamado complejo de monasterios de Meteora, cuya traducción es literalmente "suspendido en el cielo".
Los monasterios, cuatro habitados por hombres y dos por mujeres, son atracciones turísticas y están abiertos al público.
Si les gusta la nieve, y les gusta mucho, entonces podrían considerar este lugar que además es un muy buen proyecto.
Suponemos que esa es la rejilla de la calefacción. Fuente: Glamox
Como indica su nombre, la bóveda de Svalbard, un archipiélago ubicado al noroeste de Escandinavia y el lugar con menor densidad poblacional de todo el planeta (0,04 habitantes por kilómetros cuadrado), es un proyecto que busca conservar semillas "por si las moscas", en caso de que una guerra nuclear o un apocalipsis zombie extermine alguna especie de planta (y sí, ya mencionamos el apocalipsis zombie en dos ocasiones en este artículo, así que estamos oficialmente paranoicos al respecto). En 8 años de funcionamiento, acumulan más de un millón de muestras de más de 4 mil especies.
Un detalle no menor: Svalbard se conoce como la tierra de los osos polares, así que ojito. Por el lado positivo: no hay mejor lugar para disfrutar de las luces del norte.