Algunos han calificado esta batalla como la pelea entre David v/s Goliat. En efecto, este domingo 14, en las elecciones presidenciales de Venezuela, Henrique Capriles tendrá que dar una batalla que, de ganar, sin lugar a dudas sería épica. 

La mayoría de las encuestas dan por seguro vencedor al candidato oficialista Nicolás Maduro, quien con el fantasma de Chávez a su lado, ha logrado, al menos en los sondeos, un apoyo aplastante del pueblo venezolano.

Pero Capriles, abogado de 40 años, no se rinde, y al cierre de la campaña electoral más corta de la historia de ese país, asegura haber representado a la "nueva forma de hacer política".

¿Cómo ve el escenario para estas elecciones?

Nadie dijo que esta lucha sería fácil, pero Dios nos puso esta nueva oportunidad en el camino y no podemos desaprovecharla. Sabemos que esta es una lucha heroica, una lucha del bien contra el mal, de la verdad contra la mentira, de la eficiencia contra la corrupción, del pueblo contra el poder del Estado. Pero tenemos un fuerte compromiso con Venezuela y con los millones de venezolanos que creen en este proyecto y con los millones de venezolanos que ven que sus problemas no han sido resueltos.

Esta lucha es de todos y si nos organizamos, si nos movilizamos y votamos masivamente, el 15 de abril llegará un nuevo amanecer para nuestro país. El triunfo no depende únicamente de mí y de mi equipo de trabajo, el triunfo depende de todos y cada uno de los venezolanos que sueñan con un futuro mejor.

¿Cree que la imagen de Chávez aún sigue muy fuerte en la sociedad venezolana? ¿De qué manera lo afecta en su campaña?

 
El Presidente fue un hombre querido por muchos, de eso no hay duda, por eso Nicolás y su combo tratan de endiosarlo para garantizar su triunfo el 14 de abril. Se aprovechan de la situación para adueñarse de la silla que ocupan, porque Nicolás sabe que él no tiene liderazgo, que no tiene un pueblo que lo respalde.

Quienes están hoy en el gobierno utilizan la imagen del Presidente para seguir jugando con la necesidad de los venezolanos, pero ni por error hablan de los problemas que afectan a la gente. Podrán escudarse en la figura del Presidente hasta un determinado punto, pero los venezolanos saben que Nicolás no es Chávez, sólo es una mala copia.

¿Qué fortalezas tiene usted como candidato, que el chavismo no las tenga?

Nicolás no tiene con qué. No tiene propuestas, no tiene discurso, y forma parte de ese grupo de ineficientes que el propio Chávez reclamaba en cadena nacional.

Ni siquiera conoce la geografía nacional ¿Cómo pretende ganar unas elecciones en un país que ni siquiera conoce?, porque Nicolás conoce muy bien Cuba, Rusia y China, y se jacta de eso, pero está raspado en geografía de Venezuela, no tiene ni idea de cómo se llaman los estados que conforman nuestro país.

Nosotros, en cambio, hemos recorrido este país de punta a punta, pueblo por pueblo, casa por casa, codo a codo, conversando con quien más nos necesita. Conocemos los problemas que afectan a los venezolanos y para cada uno tenemos una propuesta, una solución. Hemos asumido el compromiso de resolver el problema de la inseguridad, la inflación, el desempleo, la escasez, el déficit de viviendas y las fallas en los servicios públicos.

A Nicolás no le interesa resolver los problemas de los venezolanos, lo único que ha hecho ha sido perjudicar a los venezolanos tomando decisiones que empobrecen su bolsillo; ha hecho dos devaluaciones, tenemos una alta inflación que supera la alcanzada en un año por muchos países de América Latina y una escasez que en enero llegó a 20,4%, que es cuatro veces más la cifra considerada "normal", pero además es ocho veces más que la de enero de 1999.

Por eso, nuestra primera medida de gobierno será incrementar el salario en al menos 40% para que todos los venezolanos puedan recuperar su poder adquisitivo. Además de implementar medidas que nos permitan recuperar la economía de nuestro país, tan golpeada en esos últimos meses.

Nosotros sabemos que los liderazgos se construyen, no se heredan. Sabemos que los venezolanos sí tienen con qué pero necesitan un buen gobierno que se ocupe de desarrollar sus capacidades para que puedan vivir tranquilos. Nosotros queremos que los venezolanos coman, duerman y vivan tranquilos porque en nuestra país hay seguridad para salir a la calle, hay alimentos y hay platica en el bolsillo.

 ¿Cómo ha cambiado la oposición estos últimos años? Lo digo porque antes parecía que no existía y en las últimas elecciones se vieron mucho más fuertes.

Bueno, para todos ha sido un proceso de aprendizaje. Estos años nos han permitido accionar bien, equivocarnos y corregir. Puedo decir con toda seguridad que no somos la misma oposición que hace unos años, representamos una nueva forma de hacer política, venimos a innovar, venimos a hacer las cosas de una forma distinta. Venimos a trabajar de la mano de la gente, dejando la burocracia a un lado y acercando las soluciones a los venezolanos. Venimos a construir un verdadero gobierno de unidad nacional. Venimos a construir en equipo la Venezuela que todos queremos.

"¡Me dicen que son miles y miles caminando por las calles de nuestra Caracas! ¡Bravo! ¡Somos millones y el 14 ganaremos!", escribió Capriles este siete de abril en el acto central de campaña para las presidenciales del domingo. El candidato puede no tener la mayoría para las presidenciales, pero ese día resultó la mayor concentración organizada desde 1999 por sectores distintos al chavismo, según constató el diario El País.

"La avenida Bolívar, que sirve tradicionalmente de prueba de fuego para cualquier opción electoral en Venezuela, no dio abasto para alojarlo", escribió el periódico español, indicando que a pesar de que puede que Capriles pierda esta elección, está fortaleciendo a una oposición que en años anteriores parecía dormida.