Imagina por un momento que eres uno de los mejores en lo que haces. No importa el campo en el que te desenvuelvas, eres reconocido por colegas y compañeros como uno de los más destacados en tu trabajo. ¿Estarías dispuesto a dejar a un lado tu éxito por defender tus convicciones?

Esa fue, precisamente, la encrucijada a la que tuvo que enfrentarse el mariscal de campo de la Liga Nacional de Fútbol Americano ( NFL, por sus siglas en inglés), Colin Kaepernick, cuando sus declaraciones sobre la violencia policial contra ciudadanos afroamericanos resonaron en cada uno de los medios de comunicación del mundo. Esta es su historia.

Ascenso y “caída de Kaepernick”

Colin fue dado en adopción cinco semanas después de haber nacido, siendo recibido por la familia Kaepernick, en Wisconsin. Cursó estudios en California y empezó a dar muestras de su talento para el fútbol americano en la Universidad de Nevada.

En el año 2011, fue firmado por los 49 de San Francisco, equipo en el que logró ganar dos títulos divisionales, uno de la Conferencia Nacional y disputó un Supertazón que, finalmente, no pudo ganar.

Su irrupción sorprendió a muchos, tenía todo a su favor para convertirse en un jugador de época para su equipo y para la liga. Podía correr, podía lanzar, era hábil físicamente y un estudioso de la táctica. ¿Qué podía salir mal?

A pesar de su bajo rendimiento en las temporadas que siguieron a ese espectacular período 2012-2013, fue el año 2016 el que marcaría la carrera de la estrella en ascenso de los 49 de San Francisco.

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Los enfrentamientos entre los cuerpos policiales de diversas ciudades estadounidenses y manifestantes afrodescendientes empezó a generar polémicas y cuestionamientos en gran parte de la población norteamericana. Kaepernick no fue ajeno a estos acontecimientos y decidió manifestarse con un gesto simple pero desafiante: arrodillarse durante la ceremonia de los himnos antes de los partidos de la NFL.

Colin Kaepernick a hypocrite as he ends national anthem protest now that he needs a new job https://t.co/yTvrz6PqOR - @ebenezersamuel pic.twitter.com/PzFs9ECxZp

— NY Daily News Sports (@NYDNSports) 2 de marzo de 2017

^{“Colin Kaepernick es un hipócrita cuando termina su protesta del himno nacional, ahora que necesita un nuevo trabajo”.}

" Este país se fundamenta en la libertad y la justicia para todos y es algo que no está ocurriendo en este momento [...] es algo que debería cambiar y voy a seguir del lado de los oprimidos", expresó el mariscal de campo a la prensa, tras el polémico partido en el que permaneció arrodillado durante el himno.

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Semana tras semana, siguió repitiendo su simbólico gesto, ganándose el rechazo de gran parte de los aficionados, pero también el apoyo de algunos compañeros que decidieron unirse a su protesta.

Kaepernick no fue renovado por los 49 para la siguiente temporada y el triunfo electoral de Donald Trump polarizó a una sociedad norteamericana que se dividía en diversas causas, incluyendo la segregación racial; esa que le había costado su continuidad en la NFL.

“El amor por mi gente es el combustible que me motiva”

Sin equipo, pero con ideas firmes, se involucró con diversos movimientos sociales e inició la campaña del millón de dólares, en la que donó dicha cantidad a 37 organizaciones que se dedican a luchar contra la desigualdad racial.

Además, fundó el Campamento Conozco mis Derechos, en el que se le enseña a los jóvenes de comunidades vulnerables a interactuar con la policía en diversas situaciones y así evitar detenciones arbitrarias o acciones que puedan generar violencia.

Su compromiso con estas iniciativas sociales le hicieron ganador de reconocimientos como el premio Legacy Muhammad Ali, de Sports Illustrated (2017); Ciudadano del Año, de la revista GQ (2017); y el Premio Embajador de Conciencia, de Amnistía Internacional (2018).

" El amor por mi gente es el combustible que me motiva y me fortalece en mi misión. Es el amor indestructible de las personas por ellas mismas el que me inspira, incluso cuando se enfrentan a las normas de un sistema que los puede llevar a la pérdida de la vida simplemente por ser negros", expresó Kaepernick durante el recibimiento del premio por parte de Amnistía Internacional.

"Cree en algo..."

La reciente campaña lanzada por Nike es la que ha puesto a Kaepernick en el centro de la discusión nuevamente, pues una frase resume el proceso que ha vivido desde que decidió alzar la voz por la comunidad afroamericana: "Cree en algo aunque eso signifique sacrificarlo todo".

En septiembre de este año volvió a la palestra al ser designado como imagen principal de este anuncio, el mismo que produjo la reacción del siempre polémico presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.

What was Nike thinking?

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de septiembre de 2018

^{Twitter de Donald Trump al respecto: “¿Qué estaba pensando Nike?”.}

Casos como el de Colin Kaepernick se unen a históricos hechos de la lucha de los afroamericanos por la igualdad de derechos y la oposición a la segregación racial, tales como el de Jesse Owens, Muhamad Ali y Tommie Smith.

Los deportistas, al igual que otras personalidades, tienen la capacidad de llegar a más personas por lo que representan, una espada de doble filo que los obliga a meditar con cautela cada una de las acciones que llevan a cabo y a elegir bien las causas que deciden defender. Colin Kaepernick es uno de esos.

¿Estarías dispuesto a dejar a un lado tu éxito por defender tus convicciones?