Hace un par de años, Murtaza Ahmadi se hizo famoso; una fotografía de este niño afgano jugando a la pelota le dio la vuelta al mundo. La familia del pequeño futbolista no tenía dinero para comprarle la camiseta de su ídolo, el argentino Lionel Messi, pero eso no fue ningún problema para Murtaza, quien tomó una bolsa de plástico de franjas azules y blancas y con un rotulador, dibujó el número diez y el nombre del astro de la Albiceleste.
BBC/Twitter joynaw5 |
Él no lo sabía, pero su historia, inmortalizada en una foto, sería un mensaje revelador algunos meses después; mensaje que el movimiento conservacionista Parley for the Oceans comprendió y que actualmente es una de las iniciativas más innovadoras en el mundo del deporte, pues se han dedicado a confeccionar camisetas y zapatillas a partir de plástico recogido de los océanos.
Parley for the Oceans nació en el año 2012, cuando el diseñador alemán Cyrill Gutsch decidió crear una organización para dar fuerza a los ideales de conservación y protección de los ecosistemas marinos.
Su iniciativa hoy se encuentra presente en más de 100 países y cuenta con el apoyo de varios colaboradores pertenecientes a los campos de la moda, el arte y el deporte.
Precisamente, pensando en lo deportivo, Parley for the Oceans lanzó el año pasado una línea denominada Ocean Plastic, la misma que está basada en la filosofía Aire o A.I.R (por sus siglas en inglés) y que está compuesta por prendas de vestir realizadas con materiales plásticos recolectados del mar.
Avoid (Evitar), Intercept (Interceptar) y Redesign (Rediseñar), son básicamente las piedras angulares del proyecto Parley for the Oceans. A través de este ideal, buscan la forma de reducir la cantidad de plástico que se acumula en los océanos y que, según cifras ofrecidas en su página web oficial, actualmente suman más de 250.000 toneladas, concentradas principalmente en cinco vórtices marinos (dos en el Atlántico, dos en el Pacífico y uno en el Índico).
La estrategia no se basa solamente en retirar la mayor cantidad de plástico posible de los océanos, sino en reducir su consumo y perfeccionar los estándares de fabricación de artículos cotidianos para sustituirlos por unos menos dañinos para el planeta.
"Un amplio programa de investigación y desarrollo se centra en el ciclo de reciclado de desechos de plástico marino, la prevención e interceptación de microplásticos y nuevos modelos que puedan interrumpir las categorías tradicionales de productos de plástico. Para finalizar el ciclo de la contaminación plástica, Parley y sus socios están trabajando en el desarrollo de nuevos materiales que puedan reemplazar el plástico actual", reza parte del comunicado publicado en la página de Parley.
En 2017, la multinacional alemana Adidas colaboró con Parley, lanzando al mercado ropa y calzado realizado bajo la línea Ocean Plastic. Incluso, varios equipos de la liga profesional de fútbol de Estados Unidos (MLS) y algunos clubes de Europa, utilizaron uniformes confeccionados bajo esta modalidad durante la celebración del Día Mundial de la Tierra.
Pero el vínculo entre estas dos marcas se amplió durante este año y la iniciativa se extendió hacia equipos de renombre, como el Real Madrid, el Bayern de Múnich, el Manchester United y la Juventus. Todos estos conjuntos, además del equipo de fútbol americano de la Universidad de Miami, ya han oficializado sus uniformes realizados por Parley para utilizarlos durante toda la temporada 2018-2019.
Además, el nexo entre Parley y Adidas no se queda solamente en uniformes deportivos, ya que también han lanzado al mercado diferentes modelos de zapatillas confeccionados con materiales cuya principal materia prima es el plástico recogido de los océanos.
Teniendo en cuenta la masificación de los productos de Parley y de su línea Ocean Plastic al asociarse con un gigante de la industria deportiva como Adidas, es conveniente preguntarse, ¿cuánto plástico se ha extraído de los océanos para poder desarrollar este proyecto?
En una entrevista para la revista española Neo2, Gutsch explicó que para confeccionar una camiseta de fútbol bajo la línea Ocean Plastic, se necesitan aproximadamente 28 botellas de plástico (200 gramos). Es decir, que un millón de productos (cantidad que Adidas lanzó al mercado durante el pasado año bajo la colaboración de Parley) equivalen a 200 toneladas menos de plástico en los océanos.
"Los materiales usados están recolectados del plástico procedente de los océanos y están testados de la misma manera que los convencionales [...] Son tan buenos como un material textil habitual", explica el diseñador alemán en dicha entrevista.
Gutsch espera que esta colaboración con Adidas (y otros vínculos con diferentes organizaciones) sigan ayudando a la reducción del plástico acumulado en los océanos. Sin embargo, el germano afirma que la clave de este proyecto sigue siendo la sustitución a mediano y largo plazo del plástico por otros materiales que sean menos nocivos para el medioambiente.
Para ello, han aplicado un nuevo paso apoyado en la filosofía A.I.R y en los aportes de la investigadora Suzanne Lee: biofabricación. Dicho método, utilizado originalmente en el campo médico, permite la creación de materias primas tomando como punto de partida el cultivo de células vivas. A través de la cumbre Biofabricate, diversos investigadores del mundo expusieron sus ideas para la creación de materiales que en unos años puedan sustituir en su totalidad al plástico.
"La próxima súper tendencia está por venir, y será la supervivencia [..]. la solución final es terminar y reemplazar los plásticos basados en combustibles fósiles y otros contaminantes, creando y escalando materiales que funcionan en armonía con los sistemas vivos. Los biofabricadores son los pioneros ", puntualiza Gutsch en un comunicado de Parley, a propósito de la última edición de la cumbre Biofabricate.
Este tipo de iniciativas, nos recuerdan lo simple que es dar una vuelta a los procesos industriales tradicionales, valorando el poder del reciclaje y colaborando así a un ecosistema marino más saludable.