Algunos dicen que es moda, otros lo ven como una buena idea comercial, y es que desde hace unos años atrás comenzamos a ver un apego importante del cine y la televisión por traer de vuelta los buenos "años mozos”. Ahora la cosa se expande a los remakes, reboots y re adaptaciones, pero ¿hasta qué punto es válido?, ¿se acaban las ideas?, ¿cuáles han sido aciertos y cuáles no?

Apelando a la nostalgia

Solo este año contamos con 40 películas basadas en "otra cosa"; ya sea secuela, precuela, remake o reboot, y si algo nos ha enseñado Hollywood (en su mentalidad lucrativa) es que si algo funciona bien una vez, ¿por qué no repetirlo? Para algunos esa mentalidad puede resultar un poco mediocre considerando la gran cantidad de ideas originales que deambulan buscando financiamiento, pero para otros puede significar grito y plata a la hora de vender una o mil butacas.

En lo que va de 2017, ya vimos Trainspotting 2, La Bella y La Bestia, Power Rangers, Ghost in the Shell, Kong: La Isla Calavera, y aún quedan títulos brutales como Alien: Covenant, IT, Blade Runner 2049 y Guerra en el Planeta de los Simios. Todas buenas a mi parecer, ya que responden a nuestra necesidad constante de "volver atrás" y revivir lo que nos hizo vibrar en algún momento.

Nostalgia pura del séptimo arte que no hace daño a nadie, pero que de vez en cuando exagera en recrear algo que ya está perfecto desde el punto de vista técnico. La pregunta es: ¿hay novedad en la nueva adaptación?, ¿fue necesario?

Si la respuesta es no, entonces me temo que estamos frente a una mala idea cabros.

Javiera Cerda, editora de contenidos de Nerdix.cl opina: "Creo que el arte en general se manifiesta en tendencias, y el remake es la tendencia ahora. Y aunque muchos crean que es producto de la falta de originalidad de los realizadores, yo prefiero verlo como una manera de refrescar los títulos, y el mejor ejemplo de eso es Power Rangers, que se la jugó harto por mantener los elementos más clásicos y plantear una temática más acorde a esta época, donde hasta los clichés son otros.

En el fondo una ventaja de los remakes es que permiten refrescar las versiones anteriores con elementos nuevos, que antes no se incluyeron por cualquier motivo. Profundizamos la Bella y la Bestia, diversificamos a los Power Rangers y acercamos a IT de nuevo al libro. No es tan malo en verdad".

Los que "la hicieron"

Una cosa es revivir un muerto para felicitarlo, y otra cosa es revivir un muerto para darle un balazo. Por ejemplo Mad Max: Fury Road debe ser el único caso que – siendo la cuarta secuela de una franquicia y a más de 30 años de la última entrega– logró llevarse seis premios Oscar, y convertirse en una película de culto. Ahí es cuando uno dice: "loco, sigue siendo Mad Max, con el alma intacta y con mejores efectos especiales...". Se nota que traer de vuelta a Mad Max involucraba poner todos los efectos especiales que George Miller soñó desarrollar, pero que por la limitada tecnología ochentera no pudo llevar a cabo (al menos en su 100%).

Por eso también defiendo a la nueva versión de IT (la del payaso), porque si bien la versión televisiva de 1991 fue maestra al incluir a un actor de la talla como Tim Curry, los efectos especiales y el poco talento del resto de los actores da como resultado algo que hoy en día resulta hasta chistoso de ver (recuerden esa araña final locooo). Así que mientras mejoren todos esos baches, creo que la re-adaptación puede resultar ser algo súper justificable. En definitiva, el regreso de Pennywise es un muerto que vamos a revivir para felicitar.

Trainspotting 2 la hizo contando una historia que quiso traer de vuelta a la vieja escuela de los noventa, sin pretender en ningún momento superar lo maestra que fue la primera película. Además está realizada por todo el equipo original así que, ¿qué mejor que eso?.

Ghost in the Shell es el primer live action de la versión animada, y aunque el mundo estuvo con un miedo terrible de lo que pudiera resultar de eso, pasó que Rupert Sanders (director) favoreció a las masas con mucho respeto y cariño hacia la obra maestra de Masamune Shirow, cuando podría perfectamente haber hecho un bodrio futurista ambientado en Norteamérica.

Ellos, y unos cuantos otros "la hicieron". Y es bacán, porque eso nos dice que hay personas en este universo que entienden lo que significa tomar algo que marcó nuestras vidas, para traerlo de vuelta con cambios (que quizás no a todos les va a gustar), pero que en esencia siguen conservando el alma de la obra.

Los que NO "la hicieron"

Hace poco supe que planeaban hacer el remake de Scarface con Diego Luna y aún espero que alguien me diga que es una broma.

No pretendo decir lo que es malo y bueno de manera categórica, porque personalmente encuentro que el cine es una experiencia personal en cada individuo. Pero, ¿es necesario tomar películas que ya en su primera versión ya están perfectas? A mi parecer Scarface, El Padrino, Los Goonies, Volver al Futuro y Dragon Ball son intocables, porque ya no pueden ser re-creadas así como así.

Ya tuvimos el caso de Dragon Ball Evolution que es el costalazo más grande desde Super Mario Bros (1993), porque no solo americanizó una historia ligada 100% al oriente, sino que además construyó una historia sobre una burla desenfrenada de Gokú y compañía. Cosa que prácticamente fue un insulto a toda una generación de fanáticos, pero bueno, esperemos que al menos con DBE se haya aprendido la lección...

La gallina de los huevos de oro

Volviendo al tema principal, este año llegamos a una cifra gigante de estrenos relacionados a la nostalgia. No solo en cine, sino que en animé, televisión y videojuegos, lo cual es en parte bueno, porque será un año entretenido en todo sentido.

En otros remakes menos importantes están Línea Mortal, Saw, Jumanji, Los Pitufos, La Momia, Baywatch y una lista interminable de proyectos que refuerzan la idea de que lo antiguo es más rentable que lo nuevo y desconocido.

Entre lo que es original y no tanto se encuentra Stranger Things, que toma todos los guiños posibles a lo retro y los une en una forma excepcional con una historia absorbente. Este año regresa con la segunda temporada y Netflix aprovecha el vuelo para sacar Death Note y su propia liga de superhéroes Marvel con The Defenders. Sí, da un poco de miedo, pero que tire la primera piedra el que no sienta ese fanatismo llamando a la puerta cuando aparecen los trailers.

En conclusión todo el tema de remakes, live actions y reboots parecen ser la idea más rentable para vender. Y me parece bien, si total uno al final decide con qué quedarse y con qué no. La cosa (a mi opinión) es darle la oportunidad a aquellos títulos que vuelven para mejorar algo que en el pasado no pudo desarrollarse correctamente. Quién sabe, quizás en veinte años más vamos a estar viendo un remake de Los Venegas o a Spider-Man número 13.

Pero lo más importante de todo: ¿qué opinas tú al respecto?, ¿te molesta la gran cantidad de remakes en pantalla?, ¿te sientes más seguro al ver una historia "conocida" que por conocer? Comenta antes de que hagamos un remake de tu propia vida.