padres, niños, crianza, educación, pataletas, hijos

Réplica a "Guia para padres": Solución alternativa para pataletas

En una carta, Rudloff Parra cuestiona la solución entregada por nuestra guía para padres para enfrentar pataletas infantiles y cita las recomendaciones del Gobierno y del libro Bésame Mucho al respecto.

Por Sebastián Rudloff | 2013-09-12 | 09:26
Tags | padres, niños, crianza, educación, pataletas, hijos

Estimados,

hace varios días, en su sección "Guia Para Padres", publicaron un artículo relacionado a las pataletas, el que ha sido ampliamente comentado por muchos de los lectores de este diario.

Las autoras de este artículo recomiendan ignorar las pataletas hasta que el niño se aburra y entienda que una pataleta no lo llevará a nada, y que con el tiempo dejarán de hacer pataletas. Es posible que este método sea efectivo... pero resulta, en cierto forma, una especie de tortura para moldear el comportamiento.

El programa "Chile crece contigo" del gobierno de Chile recomienda, tanto en su página oficial como en sus videos de youtube, la forma más humana de tratar una pataleta, que es dando contención al niño y ofreciendole alternativas. En la explicación que da el sitio web Chile crece contigo, explican que es parte natural del niño hacer pataletas, pues estos aún no manejan sus emociones y la pataleta es la respuesta natural de la misma. Imagínense ahora cómo se sentirá un niño que, en un estado alterado, cuando más necesita que lo calmen y tranquilicen y den amor, las personas en quien este niño más confía, sus padres, simplemente lo ignoran... Para un niño pequeño, todo es terrible, pues no son capaces de medir sus emociones. 

Ahora pongase usted, lector, en la siguiente situación: Usted es un destacado profesional, con muchos años de experiencia, y en su empresa, todos los días lo mandan a hacer aseo... usted se queja enardecidamente con su jefe, quien lo ignora, le comenta, furioso, esta situación a su familia, quienes no le responden ni le hablan de vuelta. Cuando le cuenta esto a su mejor amiga, esta se para y se va dejándolo solo. Probablemnte usted va a dejar de alegar por esta situación ¿Pero como se siente al respecto? 

El pediatra español Carlos Gonzales habla en su libro, "Bésame mucho" sobre los métodos de crianza modernos y hace la comparación entre lo que le hacemos a nuestros niños y lo que hacemos con el resto de los adultos... ¿Por qué los criterios sobre lo que es aceptable hacer a un niño son distintos a los que se usan para lo que es aceptable hacer a un adulto? Los niños merecen tanto o más respeto que un adulto en el trato hacia ellos.

Debo admitir que la columna de Guia para Padres me decepcionó y me enojó, pues, según los comentarios que leí, muchos padres "harán el esfuerzo" de ignorar las pataletas de sus hijos, cuando todo su instinto les dice que los abracen y los escuchen... Para esos padres, recuerden que "los expertos" a lo largo de la historia, han realizado todo tipo de recomendaciones contradictorias y, muchas veces, aberrantes.

Ahora, ¿Quien cree usted, madre, padre, que tiene razón, el experto, que le dice "ignore a su hijo" o su instinto, que le dice "Dale amor y hazlo entender que todo estará bien"? 


Nota del Editor

Como bien dice nuestro lector, las recomendaciones en materia de crianza no son verdades absolutas y deben verse como propuestas por parte de expertos, que los padres deben evaluar de acuerdo a sus propias personalidades y estilos de crianza.

En cuanto a la recomendación de contener emocionalmente y guiar la conducta del niño, nuestra Guía para Padres también ha hecho sugerencias en línea con las que sugiere el lector, en el capítulo llamado "Sin reprimirse ni explotar".

En opinión del editor, ambas estrategias son compatibles y debiesen utilizarse estratégicamente de acuerdo al tipo de pataleta y carácter del niño.


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Comentarios
Jorge Díaz | 2013-09-12 | 10:23
3
En lo personal creo que las pataletas se evitan desde antes, con una correcta crianza... tengo 2 hijos, adolescentes ya, y no tengo recuerdo alguno de pataletas por su parte, siempre hemos tenido buena comunicación, y siempre han tenido mucho respeto, a pesar de las grandes dificultades familiares que hemos enfrentado a veces. Creo que la verdadera solución es esa, ya que si se llega a la "pataleta" es porque algo ya se hizo mal desde antes.
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Marco Canepa | Editor | 2013-09-12 | 10:25
4
Puede ser, pero toma en cuenta que cada niño es distinto. Tengo amigos que tienen un hijo que es pura felicidad y tranquilidad, y otro que estalla con cualquier cosa, y a ambos los criaron igual.
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Katherine Jordán | 2013-09-12 | 15:26
2
Marco, tienes razón al comentar que cada niño es distinto, independiente de haber recibido la misma crianza, el punto que deseo tocar acá, es que es de vital importancia los factores que alteran esa crianza... muchas veces los papás no nos damos cuenta, pero generamos diferencias, si es el mayor, el menor o del medio... que de una u otra manera, creo, generan incidencia para las pataletas... justificaciones banas como por ejemplo: tu eres grande, puedes hacerlo solo, que es tu hermano es pequeño y necesita mayor atención, y hartas situaciones, que sin querer afectan los niños.
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¡Se agradece la replica!, yo creo que con ambos artículos, los lectores de El Definido, tanto padres como futuros padres, serán capaces de tomar la mejor decisión en el tema.
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Cristián Mackenna | Director | 2013-09-12 | 10:43
2
Gracias Sebastián! Muy buen aporte!

Creo eso sí, que la nota del editor pone las cosas en contexto.

La guía para padres de la Javiera y la Ignacia tienen una historia de contención y guía de la conducta muy buena, por lo que si se juzga sólo esa columna individualmente, se pueden tomar conclusiones equivocadas si alguien es muy literal, como siempre sucede si tomamos cualquier consejo como verdad absoluta sin contrastarlo con la experiencia y otros conocimientos que tengamos.
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gif Comentario destacado por El Definido
Paper Luis | 2013-09-12 | 10:49
2
Que bueno que exista la réplica en este medio informativo.

Respecto a las pataletas, ahora estamos con los Abrazos de Familia, que los hacemos luego de su rabieta.

Saludos
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Alfredo Rodríguez | El Barbón | 2013-09-12 | 11:39
4
Desde mi punto de vista, como padre mi estrategia siempre ha sido tratar de ignorar la pataleta, pero sin ignorar ni a mis hijas ni a sus quejas. Cómo hacerlo varía mucho no solo de niño a niño, sino de día a día. Hay días en que mis hijas amanecen claramente más necesitadas de cariño, en las que ser duro con ellas no me parece sensato, y otras veces es posible ver que la pataleta no es más que un arma de negociación estratégica de su parte.

La clave es buscar el mejor camino de contención, que permita su desahogo y que no te deje a merced de sus pataletas ni atemorizado por ellas. Lamentablemente creo que para eso no hay norma, pero la clave es no sentir ni miedo ni culpa cuando tus hijos lloran, para poder adoptar una postura constructiva y educativa.
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Sebastián Rudloff | 2013-09-12 | 12:45
4
Estimado Staff de El definido,

Muchas gracias por públicar mi carta, y ¡ponerla en portada! era mucho más de lo que me esperaba.

Seguiré leyendo seguido su diario, incluida la sección de Guia para padres, que considero un gran aporte, a pesar de no estar de acuerdo con la mencionada columna.

Saludos y mucho éxito con este diario de mirada positiva.

Les dejo mi blog sobre embarazo, proceso y crianza, por si lo quieren leer.

www.faternidad.wordpress.com
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Héctor Grandón | 2013-09-12 | 14:53
2
Rudloff tiene razón, la nota del editor también, y el artículo original, también.
En suma, la pataleta estuvo plenamente justificada.
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Cristián Mackenna | Director | 2013-09-12 | 17:18
1
Jajaja. Muy bueno!!!
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Rudolff:

Primero que todo, quiero señalar que es muy bueno que, tal como tú lo has hecho, cada uno se preocupe de informarse y formarse para enfrentar el desafío de educar a los hijos.

Tomando lo que dices en tu réplica, es importante para todos los padres saber que existen diversas corrientes psicológicas, que tienen miradas diferentes respecto a cómo criar a los hijos. Así como la que mencionas, existen otras miradas que sostienen que la pataleta no debe recibir ningún tipo de refuerzo, como la que propone la destacada neuropsiquiatra chilena Amanda Céspedes, en su libro “Niños con pataletas, adolescentes desafiantes”. (Es un libro muy bueno, muy recomendable que lo lean)

Lo que sí hay que dejar en claro son dos cosas: IGNORAR UNA PATALETA NO ES UNA TORTURA de ningún tipo, jamás le haría eso a mis hijos. Cuando mi hija está en el supermercado y se le mete en la cabeza que quiere que le compre una muñeca y hace berrinche porque no lo hago, eso no tiene otra lectura más que "quiero que se haga mi voluntad", y educar la voluntad es una tarea fundamental que tenemos como padres. Como mencionamos en otra columna, no podemos formar hijos incapaces de ceder ante sus deseos, es un daño a la sociedad y para ellos.

Lo segundo, si conocemos a nuestro hijo, sabremos que hay oportunidades en que la pataleta está siendo reflejo de otro problema que él está viviendo, y dependiendo del contexto que el niño viva es cómo debemos enfrentar la situación. E insisto, se ignora la pataleta no al niño.

El contener a un hijo es una tarea que se da día a día, al igual como enseñarle a manejar sus emociones y mostrarle cuánto lo amamos. Sin embargo, hay ciertas oportunidades en las que tenemos que poner en una escala de prioridades de lo que queremos lograr, porque aunque se nos rompa el alma, más de una vez tendremos que decir NO por el bien de ellos.
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Andrea Arenas | 2013-09-24 | 00:39
1
Javiera e Ignacia,

Lamentablemente, no estoy para nada de acuerdo con ustedes. Desde mi punto de vista, tengo varias replicas a varios de los puntos que ustedes comentan:

1. Es cierto que existen varias corrientes psicológicas que hablan sobre métodos de crianza, pero no existen corrientes que se planteen o estudien el tema a cabalidad, solo se basan en epistemología y supuestos teóricos para los que se puede aplicar a cualquier proceso, en este caso, la crianza. Con respecto a Amanda Céspedes, me parece que es una persona con título que se refiere a un tema desde su opinión profesional y su experiencia personal, pero lamentablemente, sigue siendo una opinión, no una verdad. No existen estudios que avalen la eficacia a futuro de éstas técnicas, es decir, no existen estudios longitudinales replicables para estos conceptos.

2. En segundo lugar, IGNORAR UNA PATALETA ES EFECTIVAMENTE UNA TORTURA PARA EL NIÑO, no así para el padre (eso es evidente, pues no somos nosotros quien la sufrimos). Si lo dudan, es cosa de recordar cómo nos hacía sentir a nosotros mismos de niños una de nuestras propias pataletas (ya sea porque no nos compraban algo de deseabamos, o porque nos hacía cosas que nosotros no queríamos que nos hiciera, como en el caso de peirnarnos todos los días el cabello largo, para las que somos niñas...). Cuando ustedes mencionan el "no le haría nunca eso a mis hijos", SÍ, LO HACEN, por el motivo que sea, eso no reemplaza el hecho de que nuestros hijos sufren cuando atraviesan por una pataleta, o más, cuando son ignorados (recuerdo que a mí me dolía más por esa misma razón). El hecho de que ustedes no reconozcan el sufrimiento efectivo de un niño, no quiere decir que éste no exista (y en todo caso, prefiero pensar que sí es doloroso para mi hijo, porque así puedo hacer algo al respecto... en caso contrario, mi comportamiento no resta en nada).

3. Cuando ustedes mencionan lo del supermercado: A mi parecer, las lecturas acerca de las situaciones de la vida SON MÚLTIPLES. A veces, como padres, creemos tener la verdad sobre nuestros hijos. Yo pienso que es es un resabio de aquello con lo que nosotros mismos fuimos criados. Cuando ustedes mencionaron "quiero que se haga mi voluntad", a mi se me rompió el corazón: Creo que ningún niño se enfrasca en esta PELEA DE PODERES con los padres. No se trata de quien le gana a quien!!!! Esa pelea la inventamos nosotros los adultos, porque es una forma de compensar esa misma vivencia que tuvimos en nuestra infancia... sin ir más lejos, creo que los hijos amamos tanto a los padres que repetimos sus comportamientos como forma de honrarlos... que loco, verdad!!??
La voluntad está intrínsicamente relacionada con el YO. El Yo en los niños se encuentra en formación, por lo tanto, la lucha de poderes solo viene a alentar una cosa en nuestros niños, y es lo mismo que ustedes dicen: "moldear la voluntad", que no es otra cosa que crear adultos sumamente obedientes y sumisos para esta sociedad. No es mi afán criticar su modo de crianza, sino, defender a los verdaderos indefensos: padres que son presas de su historia, y niños que son amantes de padres "locos"!! y que por lo demás, siempre pierden estas batallas: aman locamente a los padres, nos necesitan más que nosotros a ellos y somos sus héroes, para bien o para mal.

Insisto, en lo que comenta Sebastián acerca de exigirle a nuestros niños aquello que como adultos no somos capaces de hacer. Yo estoy criando a mi hija para que tenga voluntad, para que sea ella misma, para que no haga la voluntad de los demás sino la de ella, para que pueda ser creativa y solidaria, empática y amable consigo misma y con la sociedad. La mejor manera de lograrlo, creo yo, es con la crianza respetuosa, con el respeto al hijo por el solo hecho de ser persona. Y eso se logra porque nuestros niños aprenden de nuestro ejemplo: si solo le doy amor, comprensión y empatía, eso hará en el futuro, y eso es un aporte a la sociedad.

4. Para finalizar, creo que confunden "no ignorar una pataleta" con "dar lo que el niño pide". Muchas veces no podemos dar al niño aquello que pide, porque no tenemos dinero, ni tiempo, ni capacidad... pero si mi hija quiere "una muñeca del supermercado", debe ser porque se ilusionó, porque se imaginó jugando con ella y porque de verdad la quiere con todo su corazón!!! No es mi voluntad quebrantar la de ella por el simple hecho de enseñarle cosas que aprenderá por sí misma y de todas formas en la vida. Si le decimos que no podemos dársela, debemos explicar porqué, y esa es la diferencia con ignorar al niño y a su pataleta.
Así es, las invito a empatizar con sus hijos, y no desde su punto de vista de adultos, sino como niños que fueron alguna vez: Un niño de 3 o más años no entiende de sistema monetaria, ni de compra-venta, ni de oferta-demanda... ella solo ve la muñeca y la quiere tener, pero no entiende porqué no puede. Si nosotros viéramos una piedra en la playa (entiéndase que las piedras en general son gratis, puede cambiar el ejemplo por una flor) y la queremos porque es el detalle que nos falta para adornar nuestro jardín, la cogeríamos sin dudar. Pero en este caso, nosotros sabemos que podemos tomarla porque es un territorio libre para tomar piedras. En el caso de los niños, es lo mismo, pero ellos aún ni tienen la capacidad de entender porqué no puede tomar la muñeca que tanto añora. Al ignorar, se ignora al niño, porque TAMPOCO SABE DIFERENCIAR ENTRE ÉL MISMO Y SU COMPORTAMIENTO, nosotros sí. Y al ignorar, se ignora su falta de entendimiento sobre la vida y sus emociones.

Lo mejor para criar es seguir la intuición: si se nos rompe el alma, por algo será. No lo dejemos pasar.

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