Son 13 mil las familias chilenas que deben someterse a la terrible decisión de optar por dejar sus trabajos para cuidar a sus hijos con enfermedades graves, o dejarlos al cuidado de enfermeras mientras duren los largos y angustiantes tratamientos, por el simple hecho de que no pueden prescindir de sus sueldos y hasta hoy no existe una ley o un subsidio que les permita ausentarse por un período prolongado de sus trabajos.

Uno de los mayores miedos de todos los padres es que sus hijos presenten una enfermedad complicada, con riesgo de vida, y tener que verlos sufrir sin poder hacer otra cosa que confiar en la medicina, los tratamientos y guardar la esperanza de que tengan una recuperación favorable. Imaginen la angustia que debe ser además de todo esto, no poder acompañarlos.

Esa es la dolorosa realidad que viven miles de familias en Chile. Hace un tiempo conocimos la lucha de María Josefina Rojas, presidenta de la agrupación Sin Licencia Para Cuidar, con la cual lleva más de cuatro años intentando modificar el actual Código de Trabajo a través de proyectos de ley que permitan una licencia prolongada para que los padres de hijos con enfermedades graves puedan acompañarlos durante los períodos de hospitalización y tratamientos correspondientes.

"Ponte un segundo en el lugar de un niño: un día está en el colegio, estudiando, sacándose las mejores notas, jugando y llevando una vida como cualquier niño normal. Al día siguiente, está en la habitación de un hospital, con un diagnóstico tan duro que no sabe cuánto tiempo más vivirá, enfrentándose a caras desconocidas, términos médicos que no entiende, jeringas, transfusiones de sangre, quimio y radio terapias. Ahora imagínate a ese mismo niño en esa situación, pero solo, sin sus padres", nos contó María Josefina en la entrevista que le hicimos hace un tiempo.

Y si bien su proyecto de Ley fue ingresado a la sala de partes para ser discutido en el Congreso, este siempre permaneció en trámite y la falta de acuerdo y de urgencia había impedido que tuviese una resolución pronta. Pero el viernes pasado el Ejecutivo presentó un anteproyecto similar que propone la creación de un subsidio denominado Seguro Solidario para el Acompañamiento del Niño o Niña (SANNA), el que de inmediato recibió el apoyo del Parlamento.

En qué consiste el Seguro

El seguro, presentado por la Ministra del Trabajo, Ximena Rincón y el Subsecretario de Salud Pública, Jorge Burrows a la Comisión de Salud del Congreso; considera permisos o licencias subsidiadas con un tope de hasta 73,2 UF, es decir, $ 1.807.042. Esto, con el objetivo de establecer un mecanismo que entregue cobertura a la ausencia temporal y prolongada de sus trabajos a una madre o un padre -incluso a ambos- cuando esta se deba a la necesidad de cuidar a un hijo menor de 18 años afectado por una enfermedad o accidente grave o catastrófico.

“Con esto el Estado se hace cargo de una demanda instalada en el país de cobertura para padres que trabajan y que tienen niños con enfermedades que requieran de cuidado, garantizando las remuneraciones, vía seguros”, dijo a La Tercera, la ministra de Trabajo, Ximena Rincón, quien sostuvo que el plazo de subsidio planteado (90 días), sería suficiente según lo informado por el Minsal.

Y si bien el tema de la cantidad de días que sostiene el proyecto es bastante menor al solicitado por la agrupación Sin Licencia Para Cuidar (quienes consideran que seis meses es lo necesario), la senadora Carolina Goic, quien ha apoyado esta causa desde hace años, aplaudió el hecho que el seguro opere en forma separada para los padres, explicando que “esto quiere decir que la madre trabajadora puede hacer uso de 90 días, y luego el padre puede tomarse otros 90. Me alegra porque las personas que padecen esta situación han planteado que no menos de 6 meses es el tiempo en el que se requiere este permiso especial”.

¿A quienes beneficiaría la nueva ley? El beneficio será para los padres que sean trabajadores dependientes sujetos al Código del Trabajo: funcionarios públicos, independientes que coticen o trabajadores de las Fuerzas Armadas y de Orden y Seguridad Pública. De esta manera el seguro, que sería de carácter universal, obligatorio y solidario, permitirá a los padres compensar la disminución de sus ingresos, además de un permiso legal para ausentarse del trabajo, sin riesgo de ser despedidos.

El beneficio se entregará a padres que requieran ausentarse por más de 10 días y hasta 90 jornadas laborales, los que se pueden duplicar si el médico tratante prescribe acompañamiento de media jornada, pudiendo ser renovados, además, por períodos máximos de 15 días.

Realidad en Chile

Actualmente la ley da licencia a la madre por enfermedades del hijo hasta el año de vida del menor, luego de eso los padres se quedan sin posibilidades de acompañarlos si se enferman, y de acuerdo a los datos del Ministerio de Salud, en 2012 fueron 12.262 los niños que requirieron una hospitalización mayor a 10 días, 517 los menores que recibieron quimioterapia y otros 225 los que fueron desahuciados.

¿Cómo lo han hecho hasta hoy los padres y especialmente las madres en esta situación?, María Josefina nos contó que las madres se ven obligadas a pedir licencias siquiátricas, ya que es la única manera de ausentarse al trabajo sin ser despedidas. Pero el problema es que después de un tiempo comienzan a retenerles las boletas por la reincidencia de licencias y es ahí donde el problema se agrava, y muchas madres optan por renunciar a sus trabajos afectando la economía familiar.

Si se aprobase la nueva ley, se proyecta que serían cerca de 13 mil las familias que anualmente podrían optar al beneficio.Ahora lo que falta es que se ingrese el proyecto final para ser votado, aunque ya el Congreso mostró un apoyo transversal a lo presentado por el Gobierno, y se estima que esto sucederá durante el primer semestre del 2016.

¿Crees que 90 días es suficiente?