Ver carabineros dedicando buena parte de su personal a dirigir el tránsito, acudir a las miles de falsas alarmas de las empresas de seguridad, tomar declaración en accidentes, fiscalizar al comercio ambulante y vecinos molestos, y otro sinnúmero de funciones menores, es pan de cada día. Como lo es también escuchar reclamos sobre un constante incremento de la delincuencia y el vandalismo.
No es ningún secreto que la necesidad de mayor presencia policial en las principales ciudades de Chile, es cada vez es mayor. Año a año la población de las mayores urbes de nuestro país aumenta, y según el último balance de delincuencia de la Fundación Paz Ciudadana, también se ha presenciado un alza en la victimización. ¿Tiene o no que ver el crecimiento de la población? Hay distintas opiniones al respecto, pero lo que está claro es que Carabineros de Chile como institución, no da abasto para cubrir todas las demandas ciudadanas que respectan a seguridad.
¿Qué pasaría si los Carabineros fueran liberados de las labores de tránsito y otras funciones menores, y pudieran enfocar todos sus esfuerzos en la prevención y persecución de los delitos?Esto es lo que el director ejecutivo de la Fundación Ciudadano Seguro, David Rozowski propone: crear una nueva dirección de seguridad con el fin de liberar a los Carabineros de algunas funciones para que se concentren en perseguir delitos. ¿Cómo? Creando una Policía Municipal que se sumaría a apoyar a los actuales organismos policiales que tenemos, Carabineros de Chile y Policía de Investigaciones (PDI). La iniciativa es apoyada por algunos alcaldes, expertos en seguridad y parlamentarios de diversas bancadas, aunque resistida por otros parlamentarios que indican que basta con los actuales cuerpos de seguridad con que cuenta nuestro país y que sería mejor invertir en perfeccionar los que ya tenemos en lugar de crear un organismo nuevo.
“Nosotros proponemos tener una institucionalidad. Hay que tener un ente, que se llame Policía Municipal, y no es que vaya a competir con las otras dos policías que tenemos hoy en día, sino que realice funciones que ellos hacen y que les quitan demasiado tiempo”, comentó a La Tercera, el director de Ciudadano Seguro.
Actualmente, el único apoyo extra que tiene la policía, es la llamada Seguridad Ciudadana Municipalrepresentada por los guardias municipales, que son escogidos y contratados por las propias municipalidades, y que cuyas funciones están enfocadas en contribuir en lo relativo a la seguridad ciudadana y al orden público en sus respectivas comunas. Pero el problema es que cuentan con normas dispersas para regularlos, escasa formación y muy pocas atribuciones, reduciéndose sus funciones a actuar como vigilantes y llamar a carabineros ante cualquier eventualidad, por lo que no son tomados muy en serio por parte de la ciudadanía.
Ante esto, sería lógico preguntarse si no sería mejor darle mayores atribuciones a la actual seguridad municipal ya existente, en lugar de crear un nuevo cuerpo policial.
La principal razón para no hacerlo, según Rozowski, es que para otorgar mayores atribuciones, sería necesario que los postulantes contaran con una formación seria en cuanto a seguridad, en un instituto avalado por el Gobierno en el que todos tuviesen la misma formación que les permitiera establecer bien sus roles y funciones, y que también pudieran adquirir distintos rangos.Para esto sería necesario que se eliminara el rol de guardia municipal y que el nuevo cuerpo dependiese directamente del Ministerio del Interior, y que las municipalidades tuvieses la opción de contratarlos, acordando el costo en conjunto.
Por otra parte, si lo que se acuerda es darle mayores atribuciones a los guardias municipales, el problema radicaría en el tema del financiamiento. Actualmente cada municipio cuenta con un presupuesto para mantener a los guardias, pero para tener personal especializado e invertir en vehículos e indumentaria necesaria; las municipalidades quedarían fuera de presupuesto.
En cuanto a las funciones, la propuesta es que los policías municipales ayuden a descomprimir la labor de los Carabineros, haciéndose cargo de las labores de tránsito; de las constancias para compañías de seguros en caso de accidentes; del comercio ambulante, los ruidos molestos; prestación de auxilio en casos de accidentes o catástrofes; hacer capacitaciones municipales a colegios, juntas de vecinos, centros de padres, etcétera; dirigir las cicletadas, maratones y eventos masivos en vía pública, entre otras funciones tanto del ámbito preventivo como de ayuda a la investigación policial.
Este sistema ya opera en países como Argentina, España y Estados Unidos.
Por ejemplo en Madrid la Policía Municipal depende del Área de Gobierno de Seguridad y Emergencias y funciona en cada uno de los 21 distritos de la capital al mando de un oficial, con más de 7000 funcionarios en total, que pueden ser técnicos (Oficial, Suboficial, Inspector, Subinspector e Inspector Jefe) y ejecutivos (Policía, Cabo, Sargento y Suboficial). Además cuenta con dos tipos de Unidades Operativas, las territoriales y las especializadas.
Sus principales funciones son velar por la seguridad vial, la seguridad ciudadana, la vigilancia administrativa y la policía de barrio y judicial; y tienen como misión proteger a las autoridades, edificios e instalaciones de las corporaciones locales; dirigir el tráfico; realizar los trámites por accidentes de tránsito; participar en las funciones de Policía Judicial; velar por el orden y la seguridad en actos masivos, prestar auxilio en caso de accidentes o catástrofes, vigilar los espacios públicos, entre otras.
En el último informe de febrero de 2015, la Policía Municipal de Madrid detalla sus distintas actuaciones como la detención de 1091 imputados por distintos motivos como violencia doméstica, hurtos, agresiones sexuales, daños contra los patrimonios, etc. Su participación en 740 partes de accidentes confeccionados y más de 2 mil acciones formativas en educación vial en colegios, centros universitarios, centros de mayores, entre otros. Más de 13 mil controles de alcoholemia, más de 3000 operativos en actuaciones locales de espectáculos públicos, entre otras labores.
Para el alcalde de Lo Barnechea, Felipe Guevara, como dijo en La Tercera, existen tareas que realizan Carabineros y que perfectamente pueden ser asumidas por otros organismos, algunos dependientes directamente de las municipalidades: “Hay labores que no son propiamente de seguridad, que ejerce Carabineros y que los municipios perfectamente podrían ejercer. Por ejemplo, dirigir el tránsito. ¿Por qué cuando se cortan los semáforos se deben apostar uno o más carabineros? Eso podría hacerlo un funcionario municipal; o cuando hay un accidente sin lesionados y hay que esperar que llegue la grúa. ¿Por qué debe haber un radiopatrulla toda la mañana esperando que llegue esta grúa?”.
Pero también hay quienes no están de acuerdo con la creación de un nuevo cuerpo policial. Por ejemplo, el alcalde de La Serena, Roberto Jacob, se muestra preocupado en la importancia de definir roles de modo que no se generen policías paralelas.“Hay que pensar bien las atribuciones, tendríamos policías paralelas y no sé si eso sería bueno”, agregando quesi fueran sólo labores como apoyo en dirección de tránsito o ayuda mientras llegan grúas tras una colisión, es en definitiva agregar un poco más a la labor que actualmente realiza Seguridad Ciudadana. En ese caso, dice que “yo no hablaría de policías, hablaría de Seguridad Ciudadana con más atribuciones y con más preparación, que sería lo importante, y regida por algún organismo con la experticia que hoy tienen las policías”.
En la misma línea se encuentra el diputado DC y miembro de la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara, Gabriel Silber, quien agregó que al trabajo de los guardias municipales “se debería trabajar en el marco regulatorio sobre cuál es el rol que deben tener estos guardias. Hoy estamos en el peor de los mundos. Hay precariedad absoluta de su estabilidad laboral. Si un carabinero es herido o tiene un accidente, el Estado le brinda cierta protección (lo que no ocurre con los guardias)”.
Por su parte, el alcalde de Coquimbo, Cristián Galleguillos, indica que si las funciones traspasadas son similares a las que realiza actualmente Seguridad Ciudadana, como la prevención, no genera mayor problema. Sin embargo hay labores que son propias de las policías, y que“se deben reforzar a estas instituciones para realizar la labor que les corresponde".