En el 2015, el estado de Hawái se comprometió a convertir el 100% de su suministro energético a energías renovables para el año 2045. Hasta ese momento, Hawái obtenía un 21% de su electricidad de fuentes renovables, y el resto venía de combustibles fósiles importados. O sea, los costos eléctricos de la isla eran altos y podían fluctuar mucho. Poder auto-sustentarse en 30 años era una meta no menor, pero relevante para la autonomía de la isla. Se trataba de un gran desafío que implicaba, entre otras cosas, lograr que las empresas energéticas coordinaran sus recursos a lo largo de una red que abarca todo el territorio.
¿Cómo lo están logrando? ¿Existen otras “universidades verdes” como esta en el mundo? En El Definido te lo contamos.
En paralelo a esto, el poder legislativo de Hawái y la Universidad de Hawái, establecieron una meta conjunta: toda la red de la universidad, que comprende diez campus en las islas, tendrá un consumo energético neto de cero para el año 2035, lo que significa que el sistema generará tanta energía renovable como la que consume.
Ya existen edificios de energía neta cero (EEC) en el mundo, como el proyecto Beddington Zero Energy Development (BedZED) en Londres, una eco-aldea sustentable de más de 100 casas en el Reino Unido. La gracia es que la energía es generada en el propio inmueble, mediante fuentes de energías renovables, las que corresponden a un volumen idéntico a la energía demandada por el edificio. Esto es innovador para las universidades del mundo, que al no poder “partir de cero” con una construcción sustentable, deben actualizar sus sistemas energéticos y sus formas de, por ejemplo, calefaccionarse e iluminarse.
En lo específico, para el 2019 un campus de la Universidad de Hawái llamado College Maui, será uno de los primeros campus de Estados Unidos en obtener el 100% de la energía que utilizará de una instalación solar en el lugar, acoplada a baterías de almacenamiento. Johnson Controls es la compañía tecnológica y energética que diseñó la matriz solar del campus, gracias a la cual Maui College podrá prescindir de la contaminante energía basada en combustibles fósiles cuando sea operativa el próximo año.
El camino de Maui College hacia esta senda sustentable comenzó cuando en la década de 1980, uno de sus actuales directivos fue contactado por una compañía energética, proponiéndole una asociación inusual para la época.
Los contratos de performance de ahorro energético (Energy Savings Performance Contracting), son la forma mediante la cual las compañías energéticas se asocian a edificios para implementar medidas de eficiencia energética. Así, ambos reciben incentivos económicos en base a ese ahorro. Las medidas pueden ir desde reducir el uso del agua, hasta el uso de energías renovables.
Cuando el estado de Hawái comenzó a incentivar el uso de energías renovables y el Performance Contracting, la Universidad de Hawái y Johnson Controls se encontraron, en un momento en el que los antiguos edificios universitarios requerían de mejoras de manera urgente, como reparaciones a sus sistemas de calefacción y enfriamiento. Con la ayuda de las energías renovables, estas mejoras podían ser llevadas mucho más lejos.
Johnson Controls comenzó a trabajar en la universidad el 2010, inicialmente sólo evaluando la eficiencia energética del lugar, pero de a poco fue tomando medidas más relevantes. Finalmente, llegó a construir e instalar los paneles solares con forma de toldos e instalaciones techadas que hoy en día se conectan a las baterías de almacenamiento. Gracias a esto, pronto se podrá generar suficiente energía para alimentar todo el campus de Maui College e incluso otras universidades comunitarias del sistema reducirán su uso de energía fósil de un 70 a un 98%.
Además, la Universidad de Hawái y Johnson Controls también se asociaron en el ámbito de la educación, con un programa curricular de pasantías y talleres para estudiantes que se lanzará junto a los nuevos sistemas energéticos.
¡Pero no sólo en Hawái “se cuecen papas”! También hay otras universidades que están dando lecciones sobre sustentabilidad al mundo.
La Universidad del Nuevo Sur de Gales (UNSW, por su sigla en inglés) en Australia, en tanto, anunció un acuerdo tripartito con las compañías Maoneng Australia y Origin Energy para que un 100% de su electricidad provenga de paneles solares. Cuando esto se cumpla, podría convertirse en la primera universidad del mundo en ser completamente neutral en carbono. El acuerdo con las compañías implica que éstas serán las encargadas de su suministro energético por 15 años, con el fin de que la universidad alcance la neutralidad de carbono en el uso energético para el 2020.
"También es muy significativo y un testimonio para la investigación de clase mundial, llevada a cabo aquí en UNSW, que el desarrollo de una tecnología en que desempeñamos un papel tan crucial, ahora esté siendo utilizada para proporcionar a la universidad una fuente renovable de energía libre de emisiones”, dijo el presidente y vicerrector de la Universidad, Ian Jacobs, en el sitio web de la universidad.
En tanto, la Universidad del Estado de Arizona, completó en el año 2014 la construcción de un paraguas energético; un toldo compuesto de 1.380 paneles solares fotovoltaicos capaces de producir 397 kilowatts de electricidad. Este paraguas conecta al edificio Memorial Union, la librería y la fuente Cady de la Universidad, sin dañar la naturaleza ni el ecosistema que los rodea, y brindando electricidad que permite que funcione la calefacción, luces LED, altavoces y televisores del lugar. Esta instalación también se dio dentro del contexto de una red de 88 sistemas solares en los que invirtió el estado de Arizona.
Estados y ciudades comprometidas con la sustentabilidad y los incentivos que éstas impulsan, dan espacio para que importantes centros urbanos como lo son las universidades se “pasen” al bando de las energías renovables. Esto, sumado a los avances tecnológicos que siguen apareciendo, hacen más factible que cada vez más edificios se acerquen a la meta de las emisiones de carbono cercanas a cero, contaminando muchísimo menos nuestro medioambiente en el proceso de generar combustible.