Los hijos de la ingeniería y el diseño suelen ser grandes inventos para la humanidad. Promover su creación entre las nuevas generaciones es la idea de James Dyson, famoso por haber inventado el potente secador de manos que utiliza un "cuchillo de aire" (airblade) que ahorra energía al secar la manos en menos tiempo y sin calentar el aire, un ventilador sin aspas y una aspiradora que no necesita bolsa. Con su fundación, una vez al año premian las mejores soluciones tecnológicas a problemas del mundo de hoy.
En un artículo anterior les contamos sobre las geniales innovaciones que vieron la luz en 2013 y ahora les presentamos el gran ganador 2014: MOM, una incubadora portátil para salvar a los niños prematuros de la muerte. Y para no dejar grandes ideas abajo, también les contamos sobre los tres subcampeones.
Los niños prematuros que no son bien atendidos al nacer tiene altas probabilidades de morir, sobre todo en lugares donde acceder a un hospital equipado es prácticamente un sueño. El 75% de las muertes derivadas por un nacimiento prematuro podrían ser evitadas si los tratamientos fuesen más asequibles, según la Organización Mundial de Salud.
James Roberts, vio un documental sobre los niños que nacían prematuros en los campos de refugiados sirios y luego de eso se preguntó: ¿Cómo salvar a los 27.500 niños que morirán en todos los campos de refugiados debido a la falta de incubación?
Para eso creó MOM, una incubadora inflable que requiere de poca energía y puede incluso funcionar con una batería de auto. Se traslada a los lugares necesitados en cajas y una vez que llega, se infla manualmente por la boca. A través de una pantalla muestra la temperatura interior y el grado de humedad, que se pueden programar y en caso de alguna variación suena una alarma. También para los bebés que sufren de ictericia (piel amarilla por aumento de la bilirrubina), cuenta con una unidad plegable de fototerapia.
Según el propio James Dyson, “el invento de James demuestra el impacto que puede tener la ingeniería y el diseño en las vidas de la gente. Para los países occidentales las incubadoras son algo cotidiano; no pensamos en lo inaccesibles que son para los países no desarrollados debido a su diseño ineficiente. Gracias a su brillante idea, James ha conseguido crear una incubadora totalmente diferente que puede salvar cientos de vidas”.
Gracias al premio, James recibirá 45.000 dólares para comercializar su diseño, el cual proyecta que esté listo para el 2017.
Tres diseños más, también relacionados con la salud, se llevaron un reconocimiento por parte de la fundación y recibieron 7.500 dólares para avanzar con su proyecto:
Una silla de ruedas fuera de lo común, que revoluciona por completo las capacidades de quienes no pueden caminar. Con sus sistema, sostiene las piernas de quien la usa y le permite sentarse, ponerse de pie y moverse en posición vertical, minimizando las diferencias entre una persona con discapacidad y los demás.
De esta manera amplía considerablemente las posibilidades de acción en la vida diaria y para aquellos que hayan tenido un accidente que los dejó en esas condiciones, significa prácticamente recuperar el comportamiento natural de antes.
QOLO, desarrollado por estudiantes de ingeniería en la Universidad de Tsukuba (Japón), utiliza el peso corporal de la persona para controlar los componentes eléctricos que permiten sentarse arriba o pararse. Para el movimiento vertical, el usuario puede avanzar simplemente por la inclinación de su parte superior del cuerpo, y girar en cualquier dirección inclinando también la parte superior.
El protector solar no nos salva del todo de los rayos UV, sobre todo porque tienen un tiempo límite de efectividad. Pero en serio, ¿quién se echa bloqueador tres veces durante una tarde en la playa? ¿o en la vida diaria? Es muy fácil olvidarse y las consecuencias pueden ser gravísimas: cáncer. Ese problema puede solucionarse con este lápiz marcador.
Suncayr, desarrollado por un equipo de ingenieros de nanotecnología de la Universidad de Waterloo (Canadá), tiene una tinta especial que avisa cuando el filtro UV ha perdido su poder. Basta con rayar con este lápiz cualquier lugar de la piel y luego aplicar el bloqueador sobre eso y por todo el cuerpo.
Una vez que el filtro haya perdido su efectividad, la tinca de Suncayr cambiará de color avisando que es hora de volver a aplicar crema. Después de hacerlo, la tinta vuelve a cambiar a su color inicial y queda lista para avisar nuevamente cuando los rayos UV esté atacando directamente la piel. Algo práctico para adultos y hasta divertido para los niños que quieran dibujarse la piel. Es resistente al agua y una vez terminado el día de intenso sol se puede lavar.
El dolor está hecho para avisarnos que algo anda mal en el cuerpo, pero cuando perdemos sensibilidad esas alertas quedan en silencio. Bruise pretende traerlas de vuelta y especialmente para los deportistas discapacitados de alto rendimiento que no sienten sus piernas. En todos sus entrenamientos y competencias se pueden causar graves lesiones en sus extremidades, que necesiten tratamiento inmediato.
Por eso unos estudiantes de ingeniería del Royal College of Art (Inglaterra) crearon un traje inteligente hecho de una tela elástica, que integra en varias zonas claves del cuerpo películas sensibles a la presión que pueden indicar una lesión causada por el impacto. Cuando se recibe un golpe, estas láminas cambian irreversiblemente a color rojo y según el patrón del dibujo se puede estimar a qué tipo de daño corresponde. Luego de utilizarlas se pueden intercambiar por unas nuevas. Bruise está pensado para el ejercicio, por lo que absorbe la transpiración y se acomoda a la anatomía muscular, permitiendo la libertad de movimiento.