No toda la ropa que se usa necesita de un lavado. Si bien muchas prendas quedan inutilizables después de un día de uso,
la mayoría solo necesitan estirarse y ventilarse un poco para ser usadas de nuevo. El problema es que muchas veces no hay tiempo suficiente para un planchado rápido o las prendas tienen olores que finalmente nos hacen optar por el lavado.
La empresa
Whirlpool creó una máquina llamada
Swash que permite tener la ropa
lista para usarse en tan solo diez minutos. Si bien no es una lavadora, ya que no quitará las manchas de las prendas, sí está diseñada para dejar la ropa
sin arrugas y perfumadas. La empresa la define como un "sistema de cuidado de prendas".
Swash puede trabajar con una prenda a la vez y su tamaño permite acomoda hasta una chaqueta. La prenda se pone en un colgador en el interior de la maquina y se agarra con unas pinzas, para dejarla estirada. Luego se colocan unas pequeñas pastillas que contienen humidificadores y neutralizadores de PH, que serán las encargadas de dejar tu ropa lisa y con un agradable olor, en conjunto con un proceso que eleva la temperatura hasta 90 grados, dejando tu ropa lista para ser utilizada una vez que sale de la maquina. Según sus fabricantes, este sistema no solo cuida la prenda, sino que incluso puede revertir parte el encogimiento que ocurre en el lavado, al "relajar las fibras".
La importancia del diseño
Una de las mayores preocupaciones de los creadores de Swash, fue el diseño que debía tener. En la búsqueda del aspecto, pensaron que debía estar diseñada para ser utilizada en lugares cercanos a la habitación, como el clóset. “Empezamos a pensar en esta máquina absolutamente diferente a una lavadora normal”, señalaba Pat Schiavone, vicepresidente de diseño de Whirlpool.
La idea era que las personas pusieran su ropa en la maquina, se fueran a duchar y cuando salieran la prenda ya estuviera lista para ser utilizada. Por esto crearon un aparato delgado y con un diseño moderno, que se puede adaptar hasta en el clóset de un hogar. Swash tiene un metro y 30 centímetros de alto, 76 centímetros de largo y solo 40 de ancho. No necesita agua para funcionar, por lo tanto no tiene que estar conectada a una manguera. Solo necesita de electricidad.
Por su diseño, este producto pareciera ser de esos simples prototipos que nunca salen a la venta en el mercado. Pero no es el caso de
Swash que
ya está disponible para su compra. De hecho puedes adquirirla directamente desde
Bloomingdale´s por 500 dólares (algo así como 250 mil pesos), sin contar el despacho. En todo caso, si cumple lo que promete, la veremos en nuestras tiendas más temprano que tarde.