Si las botellas de plástico fueran humanas, no tendrían muchos amigos. Menos hoy. Con su merecida fama de enemigas del medioambiente, debido a su largo tiempo de degradación (de 100 a 1.000 años), estos envases están cada vez más solos. De hecho, en San Francisco ahora prohibieron que se vendieran en lugares públicos . En este gallito están perdiendo. Sin embargo, hay varias iniciativas admirables, que sin las botellas plásticas, no contarían una historia de éxito.
En las zonas vulnerables de distintos países, donde no hay luz eléctrica, ni áreas verdes o comida saludable para la alimentación, las botellas de plástico han resultado ser una solución para varios problemas.
Está el caso de Alfredo Moser, un mecánico brasilero a quien —literalmente— se le prendió la botella. En precarios sectores de Uberaba constantemente sucedían apagones eléctricos debido a que las fabricas consumían demasiada electricidad y el suministro no daba abasto. Buscando una solución a este problema, Moser recordó la técnica que le enseñaron para encender hierba seca: Una botella llena de agua utilizada como lupa y se hacía el fuego.
Con ese método dando vuelta en su cabeza, se preguntó qué pasaría si incrustara esas mismas botellas plásticas en los techos de las casas, les pusiera agua, un poco de cloro para evitar la suciedad y... ¿hágase la luz? Tal cual. La refracción de luz solar nuevamente hacía lo suyo, simulando ser una ampolleta de entre 40 y 60 voltios. Y gratis.
"Liter of Ligth" (litro de luz), nombre con que se bautizó esta causa, ilumina miles de hogares dispersos en 15 países como India, Indonesia, Tanzania, Argentina, Bangladesh, Camboya, Suiza , entre otros.
Para perfeccionar más el sistema y permitir que en la noche la botella siga iluminando, se le ha añadido un pequeño generador solar, de bajo costo, que permite almacenar la luz que la botella suministra, para que se pueda encender automáticamente en la noche.
Sin agua potable, zonas de cultivo o sistema de alcantarillado, en las laderas de Altos de Cuzcá (Colombia), se hacía muy difícil llevar una vida ajena a enfermedades. Carolina Forero, estudiante de 22 años, preocupada por esta situación, buscó una solución a través de su tesis que le permitiera a sus habitantes acceder a comida sana y la encontró en... la botella de plástico.
La falta de jardines en las casas hacía muy difícil que las familias plantaran sus alimentos para asegurar un buen trato. Forero propuso ¿Por qué no en el techo? Y así fue como a través de talleres les enseñó a la gente de la comunidad a cultivar lechugas, cebolla, cilantro, hortalizas y rábanos en la superficie, utilizando botellas PET de tres litros y agua lluvia recolectada en baldes.
África es conocido mundialmente por sus salvajes paisajes, su profunda cultura, pero también por la cruda pobreza en la que vive una gran parte de su población. Siendo Nigeria uno de los países azotados por la precariedad y la violencia, no se queda exenta también del excesivo montón de botellas plásticas en desuso que contaminan las tierras. Sin embargo, una vez más, a alguien se le ocurrió cómo hacer de esos envases algo útil y no se le ocurrió nada menos que convertirlos en un hogar.
Las botellas plásticas rellenas de arena compactada son 20 veces más fuertes que el ladrillo tradicional. Siendo un país donde hay muchos recursos para la construcción, esta idea abarató la edificación de una casa hasta 1/3 que una tradicional. Además, su material amortigua los intensos calores nigerianos y su resistencia también la vuelve completamente a prueba de balas.
Esta fue una de las primeras noticias que publicamos en El Definido y generó mucho interés: ¿Cómo hacer un huerto si no tienes jardín ni terraza? Y es que el tema del espacio reducido en las viviendas es muy relevante, sobretodo en estos tiempos en que cada vez vivimos más hacinados. Para poder hacer esta dinámica adivinen qué necesitan... una ventana y bueno, ¡una botella de agua! ¿Para qué? Para construir un huerto vertical.
La ventana debe recibir al menos seis horas de luz al día (la orientación al norte o oriente son optimas), debe existir ventilación, pero no corrientes de aire y que haya una temperatura relativamente constante durante cada estación del año, para lo cual el interior de un departamento resulta ideal. Las instrucciones de manera detallada las puedes revisar en este link. Por mientras puedes ver esta imagen resumen a ver si te motivas.
Ahora, si bien esto no transforma a las botellas de plásticas en las mejores amigas del medioambiente, sí hay que reconocerlse que están haciendo mérito para poder ayudar lo más que pueden a otro tipo de problemas que tiene el planeta.