Existe una simple prueba para saber si una película tiene tintes machistas o no. Se llama el Test de Bechdel y hay que contestar sólo tres interrogantes:
1. En la película salen al menos dos personajes femeninos.
2. Dichos personajes deben hablarse la una a la otra en algún momento.
3. Dicha conversación debe tratar sobre algo que no sea un hombre (no limitado a relaciones románticas, por ejemplo dos hermanas hablando de su padre no pasa el test)
Sorprendentemente, muy pocas películas pasan este test. Para muchos es motivo de la poca participación femenina en la producción y dirección de cine.
Entre los graduados de las escuelas de cine en Estados Unidos, el 50% son mujeres. Se podría decir entonces que el interés por esta área es similar entre hombres y mujeres, al menos en ese país.
También con el tiempo hemos visto cómo algunas directoras han obtenido no sólo prestigio sino que también nominaciones a diferentes galardones del mundo del cine, como por ejemplo la primera mujer en ganar un Oscar en Mejor Dirección, Katheryn Bigelow y la aclamada por la crítica, Sofia Coppola.
Sin embargo, sólo el 7% de los directores de las 250 películas más taquilleras y también independientes más vistas, han sido mujeres. También sólo el 18% de los directores que participaron en festivales de cine entre agosto de 2011 y agosto de 2012, eran de este género.
Por lo mismo, una empresa está buscando cambiar esta situación. Gamechanger Films financiará exclusivamente películas dirigidas por mujeres.
Esto no quiere decir que sean fondos de caridad, aclaró a FastCompany, su presidenta Mynette Lois, sino que "será el primer fondo con fines de lucro para mujeres. Tenemos una mentalidad comercial", porque ella tiene una teoría:"Mientras mejor nos vaya en taquilla y si rendimos bien financieramente, más se abrirán las puertas para todas las mujeres en las distintas fuentes más tradicionales de financiación. Esa es la esperanza. Y por eso decidimos hacer esto con fines de lucro", explicó.
De las películas más vistas, la primera mujer aparece recién en el lugar 208, con Jennifer Yuh, quien dirigió Kung Fu Panda. "Es triste", asegura Lois a FastCompany. "Hay muchos estudios sobre este tema y creo que la principal razón por la que las directoras se sienten estancadas en sus carreras, es porque las puertas de la financiación está cerradas para ellas. Muchos de quienes toman las decisiones en ese aspecto, son hombres", comenta a Time.
Esta empresa con sede en Nueva York financiará total o parcialmente y con un presupuesto entre uno y cinco millones de dólares, a distintos proyectos de distintos géneros. El único requisito: que haya una mujer tras la cámara.
¿Crees que esto sea lo que se necesita para igualar las oportunidades de las mujeres en el cine?