Una de las mayores limitantes que surgen al momento de pensar en comprar una moto es el tema de la seguridad. Es que es cierto, los riesgos de pasear sobre dos ruedas son más altos que en otros medios de transporte ya que, a falta de una carrocería protectora, como la del auto, es el cuerpo del piloto el que absorbe el impacto de un choque o caída. Pensando en esto, es posible aumentar la seguridad de los motoqueros, más allá del uso del casco. El mercado ofrece una variedad de airbags para motociclistas.
Se trata de chaquetas que funcionan tal y como los airbags de los automóviles: se inflan en caso de accidente. Las bolsas de aire cubren las partes más sensibles y en donde más se provocan daños en los motociclistas, como el cuello, la espalda, el tórax, las caderas y el coxis. Además, se limita la torsión de la columna y el casco no se desplaza hacia atrás o para los lados. Así se evitan lesiones graves en la columna vertebral o de fracturas en las costillas y hombros. Lo bueno es que son cómodas y sus diseños no son muy diferentes de las vestimentas tradicionales.
Las chaquetas se inflan gracias a unos cilindros de CO2 comprimido, que en menos de medio segundo las rellenan totalmente. El sistema de activación consiste en un cable que se amarra al chasis de la moto y va conectado a la chaqueta. Cuando producto de un golpe muy fuerte, el motociclista sale proyectado de la moto, su cuerpo tira el cable que activa el mecanismo del cilindro, que infla la chaqueta inmediatamente. Si se olvida de desconectar el cable cuando se baje de su moto, no se preocupe, porque no se hinchará, están diseñadas para funcionar con tirones superiores a los 30 kg de fuerza.
En Mercadolibre, Amazon o eBay se ofrecen varias de estas chaquetas. Los precios oscilan entre los 20 mil y los 500 mil pesos. Pero ojo, muchas de estas están diseñadas para proteger de raspones y de heridas provocadas por el roce, sin embargo no evitan las lesiones más fuertes y que son las que finalmente ponen en riesgo la vida del motociclista. Las chaquetas de mejor calidad y que ofrecen más seguridad, son las que tienen precios por encima de los 150 mil pesos. Hay desde chaquetas que cubren hombros, espalda y tórax, hasta las que protegen incluso los brazos y las caderas.
En chile, la tienda Chaquetas Airbag, vende modelos de la marca Helite por precios que van desde los 370 mil hasta los 620 mil pesos. Estas tienen la certificación europea lo que indica que cumplen con altos requisitos de seguridad. Es importante que al comprar una chaqueta airbag esta tenga algún tipo de certificación que compruebe su fiabilidad.
Otro punto a considerar son los tanques de gas comprimido. Cada vez que se usan deben ser reemplazados. Además, la presión del gas va disminuyendo con el tiempo, lo que puede significar un costo constante de dinero. Desde la tienda Chaquetas Airbag aseguran que los cilindros tienen una duración indefinida, pero es recomendable que se controle el peso cada seis meses para asegurarse que no exista una pérdida de presión. El precio, en la tienda, es de entre 18 mil y 20 mil pesos pero solo sirven para modelos de chaquetas específicos. En Amazon es posible encontrarlos desde 10 dólares (cinco mil pesos aproximadamente).
Para los pilotos más exigentes, existen chaquetas-airbag más tecnológicas. La marca Dainese desarrolló un chaleco airbag llamado D-air Street, cuyo sistema viene de los que se usan en las competencias de Moto GP, la máxima categoría mundial de motociclismo. Este sistema no usa un cable atado a la moto sino que tiene un sistema electrónico que detecta cuando ocurre un accidente.
Esta tecnología se basa en una tarjeta SIM, que se comunica con los distintos sensores y acelerómetros que envían señales al chaleco cuando se identifica una situación anómala, es decir, cuando hay un golpe fuerte o caída. La activación es muy rápida, ya que ante un eventual accidente o colisión, en solo 45 milisegundos y a velocidades mayores de 7 kph, se inflará el chaleco en base a dos generadores de gas. Este sistema se vende en Europa y cuesta entre 1200 y 2000 euros (800 mil a 1 millón 300 mil pesos aproximadamente), se incluye el chaleco y el kit que se debe instalar en la moto. Lo malo es que al igual que los autos, cada vez que se activa el sistema debe ser llevado al taller para reprogramarlo.
¿Te da confianza este sistema de seguridad para las motos? ¿Conoces otras tecnologías que brinden más seguridad a los motociclistas?