¿Cuántas veces peleaste con tus papás porque no te querías ir a lavar los dientes? Es probablemente una de las luchas más recurrentes de quienes tienen hijos. Luego, creciste y aprendiste lo importante que es la higiene bucal. Sin embargo, todavía tienes preguntas sobre el tema.

Tranquilidad, no eres la única persona en el mundo que tiene dudas sobre qué cepillo usar, qué pasta de dientes es mejor o si deberías lavártelos con más frecuencia.

En El Definido conversamos con la dentista y profesora de la facultad de Odontología UC, Beatriz Mellado, y la odontopediatra de la Clínica Nueva Panorámica, Pamela Bornscheuer, para aclarar todas las dudas que nos inundan sobre el tema.

Aunque ojo, en el mundo no hay una regla única sobre el cepillado de dientes y finalmente la respuesta, muchas veces, depende de cada profesional.

1. ¿Cepillo blando o medio?

Estás ahí, frente a una infinita variedad de cepillos de todos los colores, formas y precios posibles, pero no tienes idea cuál es el mejor para tus queridos dientes. ¿Te ha pasado?

Ambas dentistas nos explican que es muy importante optar por uno suave o blando. “El cepillo puede ser un elemento muy abrasivo para los dientes y para la encía, si te cepillas con uno duro o medio, puedes causar que la encía tenga una recesión”, explica Mellado. En simple, significa que la encía se “recoge”, lo que puede provocar sensibilidad en los dientes.

“Los cepillos blandos o suaves tienen mayor cantidad de filamentos y son más flexibles, lo que permite una mejor limpieza y mayor acceso a los espacios interdentarios. Por otra parte, al ser suaves son menos agresivos para los dientes y encías”, explica Bornscheuer.

Entonces dile adiós a los medios o duros, porque además de que pueden provocar daño, no limpian más ni mejor que los otros. Solo son recomendables para cepillar las placas, prótesis, planos para dormir o cualquier elemento que sea externo a la boca.

2. ¿Cada cuánto tiempo debo cambiarlo?

La técnica para saber que es hora de renovar tu cepillo, es cuando veas que está chascón, es decir, cuando se desordenan los filamentos del cepillo. Aunque en general se recomienda hacerlo cada tres meses.

3. ¿Son mejores los cepillos eléctricos que los normales?

Muchos creen que con un cepillo eléctrico, los dientes pueden quedar mucho más limpios, sin embargo, esto no es así.

“Ambos pueden lograr un buen cepillado si se utilizan correctamente. Un cepillo eléctrico es recomendado en niños ya que sirve de motivación y en pacientes con dificultades de motricidad”, cuenta Bornscheuer.

Lo mismo dice Mellado, quien explica que los resultados son los mismos si uno puede lograr una buena técnica.

4. ¿El enjuague bucal sirve para algo?

Justo al lado del estante de los cepillos, encuentras los enjuagues bucales, también de distintos colores y que te prometen cuidar tu boca durante varias horas.

Ambas profesionales dicen que sirven, pero advierten que antes de comprar uno, es necesario que sea recomendado por un dentista. “Hay enjuagues de muchos componentes distintos y cada uno tiene diferentes indicaciones”, explica Mellado.

Además, aclara que algunos tienen un mayor componente de flúor, que ayuda a prevenir las caries. “En general los que contienen flúor son un complemento al cepillo y pasta, pero no lo reemplazan”, dice Bornscheuer.

Otros tienen clorhexidina, pero esos tienen que ser recomendados exclusivamente por un dentista, porque su uso se recomienda durante solo dos semanas, ya que pueden tener efectos adversos si se utilizan por un tiempo muy largo.

También hay algunos que tienen alcohol. Esos, ¡evítalos a toda costa! Porque el alcohol provoca daño, irrita las encías y las mucosas.

5. Al elegir una pasta de dientes, ¿qué hay que tener en cuenta?

Y cuando llegamos a la sección de las pastas dentales, por costumbre compramos la misma de siempre, porque nos gusta, es la más barata o porque es la que hemos usado toda la vida. ¿Hay alguna diferencia entre una u otra?

A la hora de elegir una, lo más importante es “la cantidad de flúor que tengan. En niños se recomienda que tengan al menos 1000 ppm de ion flúor y en adultos 1450 ppm de flúor, esto se ve en los ingredientes de las pastas”, asegura Bornscheuer.

Mellado nos dice que debemos tener precaución con las que dicen que son de blanqueamiento (whitening), porque funcionan en base a elementos abrasivos, que pueden desgastar un poco la capa más superficial de los dientes. Es cierto que ayudan a eliminar tinciones (manchas), pero pueden dañar el diente. “Entonces, lo recomendado es no utilizar este tipo de pastas y sacar las manchas con limpiezas periódicas con el dentista”, sostiene.

Ahora que ya sabes cómo elegir todos los utensilios que necesitas para un lavado perfecto, acabemos con las dudas que existen en torno al lavado propiamente tal.

6. ¿Los dientes se lavan de arriba a abajo o con movimientos redondos?

Mellado nos explica que la técnica, muchas veces, es personalizada para cada paciente. Dice que la forma más común de lavar los dientes es desde arriba hacia abajo (de encía a diente), pero esta puede tener contraindicaciones para algunas personas.

Los movimientos circulares, se recomiendan para los niños. “Porque es el movimiento que primero logran realizar”, dice Bornscheuer.

7. ¿Hay alguna cantidad de minutos mínima recomendada?

Ambas aseguran que lo ideal, para lograr un buen cepillado, es que dure al menos dos minutos. Una técnica para lograr esto con los niños, es que pongan una canción mientras lo hacen.

8. ¿Con qué frecuencia hay que lavarse los dientes?

Mellado recomienda que esto ocurra después de cada comida (mínimo tres veces al día), por eso explica que hay que evitar comer entre ellas, porque es difícil estar lavándose los dientes todo el rato. Advierte que luego de comer alimentos ricos en carbohidratos, es fundamental hacerlo.

“Mínimo dos veces al día, en la mañana y en la noche antes de acostarse”, dice Bornscheuer.

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9. ¿Es malo mojar el cepillo antes de lavarse los dientes?

“No, no pasa nada con eso. La verdad es que el cepillo funciona por un efecto mecánico, entonces es mucho más importante la técnica del cepillado que lo que tiene el cepillo”, dice Mellado.

Para dejar esto bien claro, nos explica que si tenemos una buena técnica, podríamos lavarnos los dientes solo con agua y lograr un efecto impecable, pero que se recomienda la pasta para poder agregar más flúor a los dientes, porque es un muy buen protector contra caries.

10. ¿Es bueno lavarse los dientes altiro después de almorzar?

En este punto, las dos dentistas coinciden en que si tienes una dieta ácida, es decir, tomas café, bebida o aliñas tu ensalada con limón, por ejemplo, lo ideal es esperar media hora para lavar tus dientes. ¿Por qué?

Una dieta ácida es erosiva o corrosiva, baja el pH en la boca, lo que provoca un desgaste en la capa más superficial de los dientes. Si le sumamos un efecto mecánico, como el cepillo, el efecto es sumatorio y puede abrasionar o desgastar más los dientes, por eso se recomienda esperar a que el pH de la boca se neutralice un poco, antes de cepillarlos.

Aunque de todas formas, “entre lavarlos enseguida después de comer y no hacerlo, mejor hacerlo aunque sea antes de los 30 minutos”, dice Bornscheuer.

Mellado nos entrega un dato muy útil. Consumir bebidas con colorantes o café, tiñe los dientes, por lo que es importante lavarlos. Pero paralelamente se trata de bebidas ácidas, entonces no es recomendable hacerlo en seguida. La solución, después de consumirlos, es inmediatamente enjuagarse la boca con agua. ¡Santo remedio!

11. ¿Hay que cepillarse la lengua?

¡Sí! Al final de cada lavado, con el mismo cepillo. Hay dos formas de hacerlo, puede ser de atrás hacia adelante o de lado a lado.

12. ¿Cuándo se pasa la seda dental, antes o después de lavarse los dientes?

“La verdad es que la evidencia no es tan concluyente en eso, pero finalmente la recomendación es que se pase antes”, dice Mellado.

Bornscheuer nos explica que así podemos remover los residuos y dejar libre las zonas entre los dientes para que pueda llegar el flúor de la pasta de dientes. “Más que eso, es importante usarla una vez al día”, agrega.

13. ¿Sirve lavarse los dientes con el dedo en casos de emergencia?

“No, no sirve. El cepillado es el que cumple la mayor función de limpieza”, sostiene Bornscheuer.

“En realidad no es tan efectivo, porque el dedo es una superficie completamente lisa y que no puede llegar cerca de la encía o entre los dientes. Por un tema de aliento, obviamente es mejor que nada, pero no te protege de caries”, asegura Mellado.

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¿Qué duda agregarías a la lista?