Ya habíamos visto anteriormente lo importante que son las
áreas verdes para cualquier persona. Su presencia, no sólo da un mayor bienestar en las personas, sino que también
ayudaría a sanar enfermedades. Y ahora, según nuevas investigaciones,
podría disminuir la delincuencia.
Un nuevo
estudio del Departamento de Geografía y Estudios Urbanos de
Temple University en Estados Unidos, tomó a la ciudad de Filadelfia como ejemplo y descubrió que
los barrios más verdes tienen una tasa significativamente menor de delincuencia que otros vecindarios con menos áreas con vegetación.
Este efecto se mantuvo incluso cuando los investigadores añadieran el factor socio económico en sus estudios. Los investigadores tomaron datos criminales de la ciudad desde el 2005, desglosada por
barrio y tipo de delito: asalto, robo con intimidación, violación de morada o hurto.
Los autores decidieron no incluir la violación y el asesinato, porque según ellos son relativamente raros en esa ciudad. Luego combinaron esos datos con imágenes tomadas de ese mismo año el satélite Lansat de la NASA. Este satélite tiene un sensor que puede
detectar remotamente la clorofila, con la que los investigadores calculan un porcentaje de verde existente en cada barrio.
Cuando cruzaron los datos, se dieron cuenta que las áreas verdes eran un referente de seguridad. Las tasas de asalto, robo con intimidación, violación de morada o hurto eran
significativamente más altas en vecindarios no vegetados. Este efecto se mantenía incluso cuando los efectos de la densidad de población, la pobreza y educación, eran considerados.
Según los expertos, hay dos explicaciones. Primero, que
los espacios verdes incentivan a las personas a pasar más tiempo al aire libre de manera social y eso desalienta el crimen. Según el estudio, ayuda especialmente a controlar el crimen cuando las personas jóvenes y las más viejas se mezclan en los espacios públicos.
Lo segundo,
la presencia de las plantas tiene un efecto terapéutico. La vegetación disminuye la fatiga mental y sus síntomas asociados, como la irritabilidad y la disminución del control de impulsos, ambos considerados precursores de la violencia.
La hipótesis aún necesita más investigación. Por ejemplo, el proyecto no diferenció entre las áreas verdes bien cuidadas y espacios cubiertos por malezas verdes, que seguramente sí tienen efectos distintos.
También se investigó sólo en una ciudad norteamericana. Sin embargo, ya habíamos visto anteriormente que las áreas verdes sí tienen un efecto positivo en distintos aspectos de la vida cotidiana, por lo que no sería tan raro que también influyera positivamente en la diminución de la delincuencia, algo que todo planificador urbano y autoridad local debería considerar.
¿Has notado como las áreas verdes afectan a tu comunidad? ¿Estás de acuerdo en que ayudarían a combatir la delincuencia?